Los picos de la creciente solo llegarían a niveles de alerta
El Paraná sigue subiendo, pero a un ritmo menor que el pronosticado días atrás y no alcanzaría a la marca fijada de evacuación, según los últimos pronósticos del Instituto Nacional del Agua.
Aunque desacelerado, el Paraná continúa su creciente sostenida en el norte de Santa Fe y Entre Ríos. Según los últimos pronósticos del Instituto Nacional del Agua (INA), los picos máximos esperados para los principales puertos de estas provincias no llegarán a los niveles de evacuación, aunque sí de alerta en algunos puertos.
Lógicamente las localidades más comprometidas son las del norte, que reciben el drenaje de la castigada Misiones y de Corrientes, donde hubo cientos de evacuados y de los que varias decenas aún no han podido retornar a sus hogares pese a la bajante de las aguas. En Reconquista la marca hidrométrica alcanzó ayer los 5,16 metros, superando su nivel de alerta (5,10) y el sábado algunas familias de la zona de islas comenzaron a autoevacuarse. Para este martes se espera el pico máximo de 5,25 metros, mientras las autoridades locales permanecen atentas a la evolución climática ante probables lluvias y el comportamiento del río Paraguay, que afecta a su vez el caudal del Paraná.
En el departamento La Paz, ubicado en el noroeste entrerriano, las aguas ayer alcanzaron 5,55 metros, y la medida mayor se espera para el 29 de junio, con 5,80, más de 20 centímetros por debajo del nivel de evacuación. El gobierno local está preparado en caso de que los pronósticos se queden cortos: "Si llega a los 6 metros, vamos a tener alrededor de 50 o 100 personas evacuadas. Ya elaboramos un plan de emergencia, encabezado por el intendente José Francisco Nogueira, que es quien coordina Defensa Civil, y todas las áreas municipales y distintas instituciones como bomberos, iglesias, clubes, el Consejo Provincial del Niño, el Adolescente y la Familia y el hospital", señaló el secretario de Gobierno, Mariano Latini.