¿Qué sistema de trazabilidad necesitamos?
El especialista Héctor Salamanco considera que la medida de la AFIP es innecesaria para controlar la evasión. Propone continuar con el modelo grupal del SENASA.
“Se puede detectar evasión en la venta de heladeras, por ejemplo, sin tener trazabilidad individual. En el ganado pasa lo mismo”, aseguró el experto.
“El sistema de trazabilidad grupal vigente en la Argentina registra los elementos relevantes del proceso productivo del ganado y brinda la información necesaria, sin mayores complicaciones ni elevados costos para los operadores”, planteó a Valor Carne Héctor Salamanco, médico veterinario y Director Ejecutivo del Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas (ABC).
Desde el punto de vista sanitario, “lo más importante es conocer el movimiento del ganado de un establecimiento registrado a otro, detallando el número y la categoría de animales que se desplazaron, además de la fecha precisa en que lo hicieron”, argumentó. Y subrayó que este monitoreo “es una fortaleza del SENASA que ha permitido mitigar pérdidas en los casos de aftosa de 2001 y 2006. El modelo se completa con algunos datos relevantes de cada etapa productiva, por ejemplo, fecha de vacunación contra determinadas enfermedades, tratamientos con productos veterinarios, etc.”
Otra función del sistema es el otorgamiento de garantías para la certificación de exportaciones a la Unión Europea y, en este caso, sí se requiere trazabilidad individual. Para ello, en la Argentina, hoy en día, se emplea el TRI que equivale al documento tipo “pasaporte” que tiene cada animal europeo. De cualquier modo, Salamanco reveló que “el SENASA está evaluando un sistema más sencillo y confiable, basado en dispositivos de radiofrecuencia, que no requieren lectura ni comunicación de datos a campo, como ocurre con los chips electrónicos propuestos por la AFIP. Algo clave es que Paraguay ya implementó un sistema de trazabilidad que no utiliza “pasaporte” y la UE lo aprobó para las carnes con destino a ese mercado”, aseguró.
Además, volviendo a la situación de la Argentina, los frigoríficos exportadores de avanzada no sólo identifican sus productos cumpliendo con las normas de etiquetado del SENASA, sino que han implementado las certificaciones privadas requeridas por las cadenas de supermercados europeas, tales como la British Retail Consortium (BRC). “Para la gestión de datos, estas plantas cuentan con poderosos sistemas computarizados lo que les permite individualizar un determinado lote de mercadería en caso de tener que retirarlo del circuito comercial. Es decir, han resuelto las demandas de trazabilidad con alto grado de confiabilidad a costos muy razonables”, pormenorizó el directivo.
Grupal e individual