Las cosechadoras superan sus propios récords
La tendencia es hacia motores de mayor potencia, cabezales draper, neumáticos radiales y duales y monitores para guiar las regulaciones de los equipos.
Auge de los sistemas para georeferenciar los datos de cantidad y calidad de granos.
La agricultura de precisión, sustentada en las herramientas que satelitalmente permiten georeferenciar los datos obtenidos, empieza con la información obtenida por las cosechadoras. Actualmente, los equipos destinados a la recolección de los granos cumplen con una función primordial para la toma de las futuras decisiones agronómicas en cada lote. Esto lo logran a través de la conectividad del monitor de la máquina con una nube web con la que se puede interactuar en tiempo real con una PC.
Eso es lo que se vió en las dinámicas de cosecha de Expoagro. Allí se presentaron los equipos con las últimas tecnologías. En este rubro aparece un tendencia marcada hacia el aumento del tamaño de las tolvas y de la capacidad de trilla y limpieza. Siguen ganando terreno los cabezales draper y los neumáticos radiales (“patonas”) y duales. Se espera que en poco tiempo todas las cosechadoras estarán equipadas con monitor de rendimiento satelital, con autoguía de conducción que posibilitará el giro en cabeceras, y automatismos electrónicos para la regulación de las principales variables que exigen los cultivos y las condiciones cambiantes de suelo.
Otra de las exigencias con la que deben cumplir los nuevos equipos de cosecha, frente al aumento de los rindes y de los volumenes de rastrojo, es contar con eficientes desparramadores de paja y granza. Esto se vuelve prioritario en la Argentina, debido a que prácticamente la totalidad de su superficie agrícola es cultivada bajo siembra directa.