Termómetro del campo marca un buen estado
El resultado económico y el maíz en la zona verde; la soja, el índice FADA y los costos en la amarilla; y los precios internacionales y el trigo en la zona de peligro.
Participación del Estado en la renta bajó pero continúa siendo alta.
La participación del Estado en la renta agrícola, índice FADA, marcó para el mes de marzo de 2016 un 67,7%, apenas por encima del 66,3% de diciembre y sustancialmente menor al 88,6% de marzo de 2015. Las razones: corrección del tipo de cambio y eliminación/reducción de los derechos de exportación.
Que el Estado participe del 67,7% de la renta agrícola significa que la sumatoria de los tributos (provinciales y nacionales, incluidos los derechos de exportación a la soja) representan $67,70 de cada $100 que genera de renta una hectárea promedio en Argentina.
El termómetro del campo
El estado de salud del campo argentino es bueno, se ve en el optimismo de los productores y en el éxito de muestras como lo fue Expoagro. Elementos como la corrección cambiaria y los cambios en los derechos de exportación son los que movieron el tablero de los números y la rentabilidad.
La rentabilidad de la producción agrícola y, en especial, del maíz son los pilares de este optimismo. Que están opacados por una participación del Estado en la renta que todavía se encuentra en niveles altos, del 67,7%, costos que están creciendo al 33,7%, y la soja que lleva una importante baja de precio en los mercados internacionales.
Dos señales de alerta relevantes
En este marco hay dos señales de alerta relevantes: