Lo que el agua nos dejó
La última semana sólo ha registrado algunas lluvias intermitentes sobre regiones puntuales del país, los milimetrajes de comienzos de abril se tomaron un tregua. Ahora llega el momento de analizar el escenario que el agua dejó: pérdidas de rinde y calidad, demoras en cosecha y sostén en las cotizaciones.
|Argentina
Desde la Bolsa de Cereales de Buenos Aires recorrieron parcialmente las zonas afectadas por las abundantes lluvias y los resultados preliminares del relevamiento a campo indicaron que las pérdidas directas por inundaciones son importantes solo en sectores delimitados. Esto se debe a que la mayor parte del área comprometida logró escurrir o infiltrar las precipitaciones acumuladas desde principios de abril.
Muchas de estas regiones lograron retomar intermitentemente la recolección de cuadros en los días previos, cuando las condiciones climáticas dieron una tregua y las precipitaciones se retiraron por un momento: pudieron observarse días a pleno sol, con temperaturas realmente bajas y escaso contenido de humedad ambiente.
No obstante, más de un 75 % de la superficie recolectable de soja aún se encuentra en pie; por eso, bajo este escenario, la Bolsa de Cereales mantiene la proyección de producción nacional en 56 millones de toneladas aunque no descarta el riesgo de registrar nuevos recortes. Bajo estas circunstancias, las cotizaciones de la oleaginosa siguen encontrando sostén.
¿Cómo sigue el clima?
De acuerdo a los pronósticos, la estabilidad seguirá protagonizando las condiciones meteorológicas durante los próximos días.