La alerta por los huevos contaminados afecta ya a siete países europeos
Francia y Reino Unido, los dos últimos en detectar partidas afectadas por un pesticida.
Trabajadores desechan huevos sospechosos de estar contaminados.
Crece la alerta alimentaria en Europa en torno al posible consumo por parte de la población de huevos contaminados. Siete países europeos —Holanda, Bélgica, Alemania, Suecia, Suiza, Francia y Reino Unido— han detectado hasta el momento la llegada de huevos procedentes de granjas donde se utilizó fipronil, un pesticida empleado para matar piojos y pulgas prohibido en animales que forman parte de la cadena alimentaria. La Organización Mundial de la Salud (OMS) califica su consumo de "moderadamente peligroso", y aunque las autoridades sanitarias consideran el riesgo para la salud como mínimo, los expertos señalan que su entrada en el organismo en elevadas cantidades puede producir vértigos, náuseas o vómitos, y en el peor de los casos, daños a hígado, tiroides y riñones.
La crisis salió a la luz la pasada semana en Holanda, donde se localizó una concentración inusualmente elevada del pesticida en 28 remesas de huevos y el Gobierno aconsejó de inmediato a la población interrumpir su consumo. Desde entonces, 180 ganaderos han visto bloqueada su producción y se han retirado del mercado los huevos sospechosos de estar contaminados. La nueva preocupación de los responsables de seguridad alimentaria holandeses es asegurarse de que el pesticida no ha infectado también la carne, en muchos casos también a la venta, para lo que están realizando nuevos análisis. El sacrificio de millares de estas aves en Holanda ha desatado las protestas de grupos animalistas.
Cinco días después de que se hiciera pública la recomendación de las autoridades holandesas, el goteo de países que han descubierto restos del tóxico, en su mayoría en huevos importados de Holanda, aumenta día a día: los responsables de seguridad alimentaria de Bélgica, Alemania, Suecia, Suiza, Francia y Reino Unido han localizado huevos contaminados, una lista en la que no aparece España. La intensidad de la crisis es de momento menor en los cuatro últimos, pero el temor se ha extendido a otros estados fronterizos como Irlanda. "Hemos identificado un pequeño número de huevos distribuidos en Reino Unido desde las granjas afectadas", reconocía ayer lunes la agencia de seguridad alimentaria británica. "El número de huevos [afectados] es muy bajo (unos 21.000), y el riesgo para la salud pública muy débil, pero investigamos con urgencia su distribución en Reino Unido", añadía en un comunicado. "Las cantidades localizadas hasta el momento no suponen un riesgo para la salud de los consumidores", coincidía su agencia homóloga en Suiza.