Presentan una forrajera que tolera sequía y suelos salinos
Investigadores del INTA obtuvieron una nueva variedad que se destaca por su alta producción de pasto y gran rusticidad.
Ranquel INTA es un cultivar de agropiro alargado que se adapta a suelos salino-sódicos y resiste anegamientos temporarios.
Gracias al trabajo en mejoramiento genético, un equipo de investigadores del INTA Pergamino –Buenos Aires– obtuvo una nueva variedad de agropiro alargado: Ranquel INTA. El nuevo cultivar se destaca por la alta producción de forraje, gran rusticidad –se adapta a suelos salino-sódicos– y presenta una elevada resistencia a sequías e inundaciones temporarias.
Adriana Andrés, especialista en mejoramiento genético de especies forrajeras del INTA y obtentora de la nueva variedad, señaló que “Ranquel INTA puede ser utilizada como forraje en un amplio rango de regiones de la Argentina por su tolerancia a ambientes con restricciones de clima y suelo”.