Cronología de las retenciones en Argentina: un repaso desde su origen en 1862

La historia de las retenciones y, en general, de la intervención del estado en el comercio de exportación es de larga data en nuestro país.

Retenciones: un instrumento con varias finalidades.

Retenciones: un instrumento con varias finalidades.

16deDiciembrede2019a las13:00

El Gobierno confirmó ayer el regreso de las retenciones a la exportación cuyo alcance abarca a todos los productos del campo argentino.

Una historia de larga data

A continuación realizamos un repaso de la historia de los derechos de exportación en nuestro país, un impuesto con impacto directo sobre la producción ya que tiene el efecto de disminuir la cotización doméstica del bien al que alcanzan.

"La traslación de su efecto hacia atrás hace que funcionen en la práctica como un impuesto a la producción", se desprende de un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario. En tanto, la experiencia internacional deja a la Argentina como caso prácticamente único de castigo a sus ramas productoras de bienes exportables.

¿Comienzo en 1862?

Según el historiador, investigador y docente, Mario Rapoport, el origen de las retenciones a la exportación se remonta a 1862 bajo en Gobierno de Bartolomé Mitre.

Desde entonces se registraron numerosos idas y vueltas con diferentes alícuotas y formas de aplicación.

IAPI en 1940

Durante varios años no se aplicaron como en la década del 20 y 30, pero lo más destacado comienza a partir de 1940 cuando el gobierno reforzó el control sobre el comercio exterior con la creación del Instituto Argentino de Promoción del Intercambio (IAPI).

De acuerdo a un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario el IAPI fue construido sobre la base de la Corporación para la Promoción del Intercambio y la Junta Reguladora de Granos.

Distintas fuentes precisaron que se encomendó al IAPI encarar la comercialización externa de las cosechas argentinas, en sustitución de organizaciones como Bunge Born o Dreyfus.

Operaba como el único comprador de cereales y oleaginosas en el mercado interno a precios fijados por el Estado: "En la práctica, los efectos asignativos de esta experiencia fueron similares a los de un sistema de derechos de exportación perfectamente móviles, que aíslan totalmente al mercado local del internacional", explicaron desde la BCR.

Este organismo funcionó hasta el 16 de septiembre de 1955, cuando se ordenó su disolución.

Derechos de exportación en 1955

A fines de 1955 el gobierno de la autodenominada "Revolución Libertadora" introdujo derechos de exportación en forma transitoria por hasta el 25%, incluyendo a las denominadas exportaciones tradicionales (cereales, carnes y otros productos del agro).

"Este primer esquema sufriría sustanciales modificaciones en los años siguientes. Los derechos de exportación volverían a fijarse en diciembre de 1958, en ocasión del lanzamiento del plan de estabilización del presidente Frondizi", se desprende de un informe de la BCR.

Ajustes en la década de los '60

A lo largo de la década de los años sesenta el régimen de derechos de exportación se ajustó en diversas ocasiones, aunque como regla general las alícuotas se mantuvieron bajas.

Desde la BCR explicaron que la finalidad del esquema era principalmente contrarrestar el efecto de las mejoras graduales en el tipo de cambio (durante la presidencia del Dr. Illia el signo monetario se devaluó nueve veces, aunque no era enteramente fijo). Por ejemplo, desde abril de 1965 las alícuotas vigentes fueron del 13% para el trigo, 9,5% a las carnes y 6,5% al maíz.

Las retenciones volvieron a formar parte central de un plan de estabilización en marzo de 1967, cuando el ministro Krieger Vasena introdujo una serie de medidas que incluyeron la devaluación del peso de 280 a 350 unidades por dólar estadounidense y la aplicación de derechos aduaneros de entre 20 y 25%, que se reducirían en forma gradual.