A días de comenzar la vendimia los productores exigen un precio justo para la uva

Destacan la necesidad de contar con una Agencia Nacional de Vitivinicultura que tenga la capacidad y responsabilidad de laudar un precio justo de referencia.

25deFebrerode2020a las08:12

La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) advirtió en un comunicado que, desde hace años, el sector vitivinícola sufre un proceso de concentración que atenta contra la producción primaria: "El mercado se reparte en pocas manos y los pequeños y medianos productores no sólo no tienen rentabilidad, sino que además no llegan a cubrir sus costos con lo que perciben por la venta de sus uvas".

A días de comenzar la Vendimia, las entidades de productores vitivinícolas pymes adheridas a CAME, de las provincias de Salta, La Rioja, Mendoza y San Juan, aseguran estar atravesando una situación de “quebranto generalizado”, sufriendo abusos en la formación de precios y hasta en la forma de pago.

La vitivinicultura es una de las economías regionales más antiguas del país. Desde CAME destacan que el sector desempeña un rol socioeconómico fundamental en el tramo central y norte de la franja andina argentina. La cadena mueve más de 100 mil trabajadores en forma directa (dato de 2016) y alrededor de todo el complejo se relacionan y articulan un sinfín de actividades.

El 80% de la producción se vende en el mercado interno, donde el consumo cayó 15 litros per cápita en los últimos 15 años; a lo que se suma el aumento de costos, principalmente de fletes, energía, mano de obra e insumos dolarizados.

Es a partir del elevado porcentaje que se destina a consumo interno, donde la “Ley de Góndolas”, apoyada por CAME, aparece como un instrumento clave para las pymes, además del consumidor, porque con el espacio en la góndola se busca evitar las prácticas abusivas. Dicha ley ya obtuvo media sanción en Diputados y se espera por su aprobación en el Senado. CAME considera que se trata de una medida reparadora que busca fomentar la competencia y generar oportunidades para los eslabones más débiles de la cadena de comercialización, como es el caso del pequeño productor.