Repuestos en helicóptero y lo último en tractores: cómo es trabajar en un campo de Australia, cuánto se cobra y cuáles son los requisitos
Estudió Comunicación Social, enfermería e hizo un curso de bombera, pero decidió emigrar para trabajar hasta 12 horas por día en un campo de algodón
La vida de Magda Lühning dio un giro de 180° cuando su padre enfermó y decidió poner en stop su proyecto de viajar por el mundo para volver a la Argentina a cuidarlo. Y no solo eso, sino que a su vez estudió enfermería y trabajó en vacunatorios durante la pandemia, afrontando con valentía este momento tan duro. Eso, solo fue el puntapié para armarse de coraje y volver al ruedo internacional, instalándose en Australia, donde hoy se mueve al frente de un tractor doce horas por día en un campo algodonero.
Se trata de una de las experiencias más intensas, pero también más hermosas que le tocó atravesar a la joven de 33 años, Licenciada en Ciencias de la Comunicación y oriunda de General Cabrera, Córdoba. Justamente su labor actual le permitió reconectar con su infancia y adolescencia en el campo, propiedad de su padre y del que Magda se hizo cargo junto a su madre y sus hermanas cuando él falleció.
En diálogo con Agrofy News, contó cómo es el trabajo rural en el país oceánico y qué trámites y pasos necesita dar cualquier joven que, al igual que ella, esté pensando en emigrar y quiera desempeñarse en el sector agropecuario. También brindó algunos consejos a tener en cuenta a la hora de abrirse paso en el terreno laboral, tarea que no es tan sencilla como parece y requiere de mucha pasión y compromiso, en palabras de Magda.
Animarse a lo nuevo
Luego de pasada la pandemia y con la apertura de fronteras, la emprendedora decidió retomar su proyecto de viajar. Si bien siempre tuvo a Australia de objetivo en el mapa, para aplicar a la Visa por ‘Working Holiday’ con el pasaporte Argentino, tenía que ser menor de 30 años, así que esa opción no era posible. Sin embargo, siguió investigando otras formas de emigrar y se enteró que si solicitaba el mismo visado con su pasaporte italiano tenía tiempo hasta los 35 años, así que no lo dudó y puso el trámite en marcha.
Llegó en noviembre del 2022 y fue a parar directo a Sidney, donde imaginó que habría gran cantidad de oportunidades laborales por tratarse de una de sus ciudades principales. No se equivocó, las oportunidades eran muchas, aunque le implicaron recorrer muchos km por día repartiendo su CV en distintos comercios al no haber obtenido ninguna respuesta a las vacantes que había mandado por internet.
“No es nada simple ni fácil, es moverse a un país nuevo, donde las oportunidades son un montón, pero no están servidas en la mano, uno las tiene que buscar si te proponés un buen salario, un buen hogar, buenos amigos se puede lograr. Yo recorrí muchas calles, hablé con los ‘managers’ de cada comercio, me presenté, conté que estaba buscando trabajo, pregunté por los puestos disponibles y así fui consiguiendo propuestas”, aseguró a Agrofy News la joven que fue desde moza, hasta empleada de una heladería y personal en cruceros.
Plantar raíces
Como Magda proviene de una familia ligada al agro, quería tener la experiencia de poder desempeñarse en este sector. A su vez, comentó que es muy común que viajeros se inclinen al ámbito rural por varios motivos, siendo el principal la posibilidad de poder ahorrar una mayor cantidad de dinero al llevar una vida modesta y percibir un salario más alto que el que se suele pagar en comercios.