La incertidumbre demora el inicio de la próxima campaña agrícola

15deAbrilde2002a las08:29
 Sin financiamiento y con mayores costos, los productores dudan a la hora de decidir la siembra de trigo

En momentos en que el clima y el aumento del gasoil complican la actual cosecha gruesa, los productores ya comienzan a sentir el efecto de la incertidumbre económica en las previsiones para la próxima campaña. Una situación que dispara el malestar en el campo, en vísperas de un próximo paro nacional de actividades, y que podría derivar en un recorte de la siembra en el ciclo 2002/2003.

A pesar de ser el sector supuestamente más beneficiado por la devaluación, el campo se encuentra en un particular estado deliberativo. Así lo confirman las masivas asambleas que la semana pasada se realizaron en distintas ciudades del interior del país para impulsar medidas contundentes de protesta.

El disparador de la protesta, que podría cristalizar en un paro a partir del 28 de abril, fue la suba de las retenciones a la exportación en un 20%, aunque la agenda de reivindicaciones incluye un amplio abanico de temas.

Entre ellos, el aumento de los insumos, el desdoblamiento del pago por la mercadería que hacen los exportadores, la amenaza de una modificación del IVA agropecuario, la aplicación del Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER) a un sector que tiene deudas bancarias por 6 mil millones de pesos y, ahora, el encarecimiento y desabastecimiento del gasoil.