Carbap renueva hoy sus autoridades
Dos listas pugnan en forma muy pareja por la futura conducción de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) para el período 2002-2004. La incógnita se develará hoy, después de las 16.30, cuando los delegados de las 114 sociedades rurales adheridas a la entidad emitan su voto.
Según los estatutos, ganará el candidato que obtenga la mayoría simple. En caso de empate, tiene un voto más la sociedad rural en ejercicio de la presidencia.
Hasta última hora de ayer parecían no sacarse ventajas la lista conocida como "tradicional", encabezada por Mario Llambías, que recibe el apoyo de las sociedades rurales más antiguas y numerosas, y de tendencia más negociadora; con la "opositora", liderada por Jorge Asurmendi, respaldada por entidades de base más nuevas y con un carácter más contestatario y combativo.
Justamente, la entidad que hasta hoy conduce Dardo Chiessa -segundo mandato consecutivo- y que representa a 34.000 medianos productores de la pampa húmeda, celebra 70 años de su creación. El acto de celebración se realizará por la noche en el Automóvil Club Argentino. Fue invitado el presidente de la Nación, Eduardo Duhalde, que aún no confirmó su presencia.
Llambías, de 56 años, agrimensor (aunque nunca ejerció, reconoce), criador e invernador de vacunos y productor de granos en General Belgrano (donde fue presidente de la Asociación de Fomento Rural) y General Villegas. Fue titular de Carbap en dos períodos y actualmente es vicepresidente de Confederaciones Rurales Argentinas.
Asurmendi, de 47 años, ingeniero agrónomo y tambero, presidió la Sociedad Rural de Vedia y fue director de Economía Agraria en Buenos Aires entre 1995 y 1996, durante la gestión de Duhalde. Si bien hasta hoy es vicepresidente de Carbap, no se considera un continuador de Chiessa, porque esa fórmula surgió de una lista de unidad que hoy ha desaparecido.
Objetivos
Con diferentes métodos los candidatos tienen objetivos comunes y confían en la unidad poselectoral. "Más allá de una solución integral, en nuestra zona preocupan las inundaciones, la financiación y el endeudamiento", dijo Llambías. "Hay que posicionar al agro frente a la crisis que vive el país exigiendo cambios en justicia, seguridad y defensa de la producción", dijo Asurmendi.