La canasta básica subió 74,9% el año pasado
07deEnerode2003a las08:36
El Gobierno pudo cerrar 2002 con una de las tasas de inflación más bajas del año. El índice de precios minoristas se incrementó un 0,2% en diciembre pasado, con lo que la suba acumulada durante el año alcanzó el 41%, una cifra que hace tan sólo unos meses parecía un objetivo incumplible, cuando la mayoría de los pronósticos privados hablaba de una inflación superior al 60 por ciento.
Sin embargo, los funcionarios no tienen muchos motivos para festejar. La canasta básica de productos registró en diciembre un aumento del 0,6%, con lo que el año pasado la suba llegó al 74,9 por ciento, según los datos difundidos ayer por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
El alza en la canasta básica, además, tiene un mayor impacto en los segmentos de menores recursos de la población, que en promedio destinan una mayor porción de sus ingresos a la compra de alimentos, bebidas, artículos de tocador y limpieza.
Entre los alimentos, los mayores aumentos de diciembre correspondieron a las naranjas y batatas, con subas superiores al 20%, mientras que en el balance anual los alimentos exportables fueron los que encabezaron las alzas. Incluso, las lentejas tuvieron el triste privilegio de ser el único producto de la canasta básica que le ganó la carrera de aumentos al dólar. En el último año, la moneda estadounidense se revaluó un 235% frente al peso, mientras que en el mismo período las lentejas secas aumentaron el 272,7 por ciento.
El costo de vida de diciembre fue, junto con el de octubre, el más bajo del año, y se mantuvo en sintonía con el del segundo semestre de 2002, que en total acumuló una suba del 8 por ciento.
Por su parte, la inflación anual fue similar a la que se registró en el primer año del plan de convertibilidad, cuando el alza entre marzo de 1991 y febrero de 1992 alcanzó el 41,6 por ciento. En el Indec destacaron que en la medición de diciembre no fue captada la suba en los precios de los combustibles, que fue anunciada en los últimos días de 2002 y que tan sólo será computada en el índice de este mes. "La verdad es que ningún analista imaginaba una inflación de 0,2%", reconoció Juan Carlos del Bello, titular del Indec.
El funcionario además subrayó el papel positivo que jugó el recorte parcial de dos puntos del IVA para contener los precios. "El impacto del IVA se hizo sentir especialmente en los precios de los medicamentos, que bajaron en el mes un 1,1%, lo que sirvió para compensar las subas en otros rubros, como el turismo, que en diciembre aumentó un 5,5 por ciento", agregó.
En diciembre, por segundo mes consecutivo, los precios mayoristas registraron una deflación, con una caída del 0,3 por ciento.
La baja en los precios mayoristas sumada a la suba minorista del 0,2% implica que los comerciantes están recomponiendo sus márgenes de ganancia. Sin embargo, en el acumulado anual la inflación mayorista (118,2%) casi triplica a la minorista.
Mano de obra más cara
El índice de la construcción tuvo un comportamiento similar al de la inflación minorista. En diciembre registró un incremento del 0,3%, con lo que acumuló un alza anual de 41,6 por ciento. El aumento del último mes se explicó, principalmente, por la suba en la mano de obra, que tuvo un incremento del 0,4 por ciento.
Sin embargo, este ítem fue durante todo el año el que registró una variación menor, con un aumento de sólo el 10,7 por ciento.
Por Alfredo Sainz
De la Redacción de LA NACION
Sin embargo, los funcionarios no tienen muchos motivos para festejar. La canasta básica de productos registró en diciembre un aumento del 0,6%, con lo que el año pasado la suba llegó al 74,9 por ciento, según los datos difundidos ayer por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
El alza en la canasta básica, además, tiene un mayor impacto en los segmentos de menores recursos de la población, que en promedio destinan una mayor porción de sus ingresos a la compra de alimentos, bebidas, artículos de tocador y limpieza.
Entre los alimentos, los mayores aumentos de diciembre correspondieron a las naranjas y batatas, con subas superiores al 20%, mientras que en el balance anual los alimentos exportables fueron los que encabezaron las alzas. Incluso, las lentejas tuvieron el triste privilegio de ser el único producto de la canasta básica que le ganó la carrera de aumentos al dólar. En el último año, la moneda estadounidense se revaluó un 235% frente al peso, mientras que en el mismo período las lentejas secas aumentaron el 272,7 por ciento.
El costo de vida de diciembre fue, junto con el de octubre, el más bajo del año, y se mantuvo en sintonía con el del segundo semestre de 2002, que en total acumuló una suba del 8 por ciento.
Por su parte, la inflación anual fue similar a la que se registró en el primer año del plan de convertibilidad, cuando el alza entre marzo de 1991 y febrero de 1992 alcanzó el 41,6 por ciento. En el Indec destacaron que en la medición de diciembre no fue captada la suba en los precios de los combustibles, que fue anunciada en los últimos días de 2002 y que tan sólo será computada en el índice de este mes. "La verdad es que ningún analista imaginaba una inflación de 0,2%", reconoció Juan Carlos del Bello, titular del Indec.
El funcionario además subrayó el papel positivo que jugó el recorte parcial de dos puntos del IVA para contener los precios. "El impacto del IVA se hizo sentir especialmente en los precios de los medicamentos, que bajaron en el mes un 1,1%, lo que sirvió para compensar las subas en otros rubros, como el turismo, que en diciembre aumentó un 5,5 por ciento", agregó.
En diciembre, por segundo mes consecutivo, los precios mayoristas registraron una deflación, con una caída del 0,3 por ciento.
La baja en los precios mayoristas sumada a la suba minorista del 0,2% implica que los comerciantes están recomponiendo sus márgenes de ganancia. Sin embargo, en el acumulado anual la inflación mayorista (118,2%) casi triplica a la minorista.
Mano de obra más cara
El índice de la construcción tuvo un comportamiento similar al de la inflación minorista. En diciembre registró un incremento del 0,3%, con lo que acumuló un alza anual de 41,6 por ciento. El aumento del último mes se explicó, principalmente, por la suba en la mano de obra, que tuvo un incremento del 0,4 por ciento.
Sin embargo, este ítem fue durante todo el año el que registró una variación menor, con un aumento de sólo el 10,7 por ciento.
Por Alfredo Sainz
De la Redacción de LA NACION