Los productores cordobeses denuncian que "hay impunidad"

06deFebrerode2003a las08:12

Reclaman cambios en la legislación. Los productores se armaron

Córdoba.- Los productores agropecuarios cordobeses están sumamente afligidos por la creciente inseguridad que los acosa en sus campos. Y esgrimen sobradas razones: en algunos lugares padecen el robo de "dos o tres animales diarios" y esta cantidad, que puede parecer de poca monta, se transforma en un volumen significativo al mes cuando se suman todos los vacunos que desaparecen de los campos de la provincia.

No son los únicos despojos que sufren. También están a la orden del día las sustracciones de cereal depositados en silos o cuando es transportado en camión, de agroquímicos, de tractores y maquinarias. En esto, sus problemas no difieren de los que enfrentan productores de otras zonas del país.

Pero lo que más ha alarmado a Néstor Roulet, presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de la Tercera Zona (Cartez), es "la impunidad" de que gozan los delincuentes. "Algo falla -le señala a LA NACION-, porque en muchos casos se sabe bien quiénes son los que roban y no pasa nada."

Cuenta que es corriente que los sospechosos "viven en los pueblos, todo el mundo sepa que son ellos, incluidas las autoridades, y sin embargo van de un lado para el otro panchamente, sin ningún impedimento que ponga coto a su accionar".

La situación determinó a la entidad a hacer pública una declaración en procura de sensibilizar a los poderes públicos por "los devastadores efectos" de una ola delictiva que con el correr de 2002 se fue expandiendo en las zonas rurales, de la mano del cambio de tendencia que representó para la economía del campo la devaluación de principios de ese año.

En el comunicado se quiso ejemplificar con algunos números el hostigamiento delictivo: robo de 20 animales promedio por mes de los campos de Coronel Moldes y otros 400 sustraídos en los últimos doce meses en Villa Huidobro. En Moldes, la cantidad trepó a 48 en enero.

Informes

Roulet repasa los informes que le han enviado la veintena de sociedades rurales integrantes de Cartez: "boom de faenas clandestinas" en Río Cuarto, "robo y faena clandestina de dos y tres animales diarios" en Pozo del Molle, "faena clandestina de 20 vacunos por mes" en General Levalle, "cinco o seis animales robados por semana" en Canals. Y sigue la lista: "robos de cereales, ganado y agroquímicos" en Marcos Juárez, General Cabrera y Monte Maíz. Lo cual demuestra que el problema "no está circunscripto a un lugar determinado".

Desde Pueblo Italiano le informaron "tres casos de robo a mano armada". Este tipo de episodios, con reducción del productor y su familia, son los que más preocupan por los riegos que corren las personas. El año pasado, hubo un par de hechos en los que los delincuentes asesinaron a sus víctimas.

A raíz de la reiteración de los asaltos directamente en el campo muchos productores se han armado y suelen actuar con un peligroso sentido preventivo: apenas ven a un extraño disparan, por lo general al aire. Pero nada garantiza que luego no se lo haga "al bulto" o al cuerpo del intruso.

Esto pasó el sábado en Canals, el pueblo dónde vive Roulet, en el extremo sudeste de la provincia. Un productor, cansado de los despojos de que era víctima, hizo como que se retiraba de la propiedad, volvió sigilosamente y sorprendió a los dos delincuentes que se habían "habituado" a robarle. Les disparó e hirió.

"Lo triste de todo esto -contó el dirigente- es que el hombre había hecho seis exposiciones ante la policía, los sujetos estaban identificados pero seguían libres."

Roulet endereza una crítica hacia la policía y la Justicia. "Evidentemente hay fallas", sostuvo. Reconoce que la policía no cuenta con los medios ni los hombres necesarios, pues de sus 12.000 efectivos 8000 se ocupan de la seguridad en la ciudad de Córdoba. Con los otros 4000