La soja hoy es Maradona en el 86
El economista Carlos Melconian se refirió, además, a la competitividad: "En el mundo, desde ese punto de vista, no necesitan abdominales pero los siguen haciendo, porque es una cuestión permanente.
Carlos Melconian, economista, manifestó en Radio 10, sobre el pedido de apoyo del ministro Roberto Lavagna a la quita del 75% ofrecida a acreedores, que “el tema de la deuda argentina en el mundo, fuera de lo mediático, es mucho menos importante de cómo se lo está tratando”, y que “no hay negociaciones, prácticamente”.
“Creo que tiene más información de la deuda pública de opiniones interesadas por el oficialismo y de representantes puntuales de acreedores, en vez de cosas efectivas que estén sucediendo en el resto del mundo”, añadió. “En el resto del mundo es un tema que ni ha empezado. Hasta académicamente se están poniendo en marcha seminarios con el objetivo de determinar ideas a futuro en este tema, porque cuantitativa y cualitativamente el caso argentino es importante, aunque esta oferta no es tomada como oferta”, sostuvo.
En el mismo sentido, Melconian señaló que “el tema de deuda no es un tema de ‘Doña Rosa’”, en tanto “no es popular, con excepción de los fondos de pensión, por ejemplo; con la deuda pública, en términos sociales, hay que buscar muchos atajos para ver el impacto directo”. Así, el economista dijo que es un asunto “que escapa a la atención de la sociedad”.
Asimismo, manifestó que no hay interés a nivel mundial por la deuda argentina “porque no hay una hoja de ruta internacional y no está desarrollado ni tecnológica ni jurídicamente cómo es una cosa de éstas”.
“Hay que ponerse a evaluar los efectos secundarios de una situación de este tipo: cuáles son las consecuencias en los próximos meses y la repercución en el sector privado”, explicó.
Melconian opinó que “la competitividad está disociada del tipo de cambio”, y que “tiene que ver con la cantidad de abdominales que el país hace por día para seguir siendo competitivo, fuera de si es 2 a 1 o 3 a 1”.
En ese orden, añadió: “Por ejemplo, las importaciones industriales a Brasil caen, después de tener tipo de cambio 3 a 1. En el mundo, desde el punto de vista de la competitividad, no necesitan abdominales, pero los siguen haciendo porque es una cuestión permanente, lo que significa que nunca podés dejar de ser competitivo y corregirlo con devaluación, para suponer que con la pildorita podés hacer la dieta que no hacés con deporte y abdominales”.
El economista expuso: “En el día a día, además de todos los líos, en el mundo también pasan cosas. Hay dos maneras de mirar los retrocesos de la Argentina: mirándonos a nosotros mismos acá, y otra en términos relativos: cuando salís afuera te das cuenta cómo vas para atrás en más rubros que el económico”.
Sobre si la Argentina padece la dependencia de la soja, Melconian consideró: “Está dentro de las reglas del juego. Es un producto que alcanza dos tercios de la cosecha y el 45% de la liquidación de divisas”, reveló, y añadió: “Es Maradona en el 86”, sintetizó.