En China perdura aún el sistema de granjas colectivas instaurado por el comunismo
Una tierra atada al pasado.
DAGAOKOU, China.- El gobierno chino dice estar decidido a incrementar los ingresos de los agricultores para disminuir la brecha entre ricos y pobres. Si es cierto, los pobladores de Dagaokou tienen algunas sugerencias.
"Si pudiera, invertiría mi propio dinero para mejorar la tierra", dice Wang Yuqi, que cultiva trigo. "Cuanto mejor sea la tierra, mejor la calidad de las cosechas, y uno puede ganar más dinero", agrega.
Pero aunque Wang tiene el capital, carece del derecho para hacer modificaciones en la tierra que ara, porque no es suya.
Los comunistas que gobiernan China prohibieron la propiedad privada de la tierra cuando tomaron el poder hace 54 años, en su revolución para liberar a millones de campesinos sin tierra de la tiranía de los terratenientes.
Las granjas colectivas siguen siendo uno de los principios del gobierno comunista incluso mientras las ciudades chinas avanzan con rapidez hacia un futuro capitalista. Los ingresos se han incrementado enormemente entre los residentes urbanos que portan teléfonos celulares.