Una fuerte sequía en el corazón agrícola

Hace dos meses que apenas llueve

08deOctubrede2004a las08:12
PERGAMINO.– “Todos los días miro el cielo para ver si aparece una nube que nos pueda traer agua. Pero no hay caso, no llega”, se lamenta Hugo Michetti, productor agropecuario de esta ciudad, mientras sujeta fuerte el volante de su camioneta que levanta sin piedad el polvo que se desprende de un camino que no tiene barro desde hace un buen tiempo.

Esta región del norte bonaerense ­–considerada el corazón agrícola de la Argentina–, en la que están las tierras más caras del país, padece una fuerte sequía que afecta el trigo, el maíz y las pasturas para el ganado.

Las últimas lluvias abundantes que llegaron a esta zona, con unos 50 milímetros, en promedio, cayeron hace dos meses. Sin el dramatismo de otras regiones, como en el interior del Chaco, que en lo que va del año sufrió la muerte de miles de animales por una sequía, hoy, aquí, a 220 kilómetros de Buenos Aires, todos los días se escuchan más voces que expresan que la falta de agua podría llevar al campo a uno de los peores escenarios productivos de los últimos siete u ocho años.

Es que Pergamino, un partido bonaerense que tiene unas 80.000 hectáreas destinadas a ganadería y otras 210.000 para la producción agrícola (150.000 hectáreas con soja de primera -de siembra temprana-, 45.000 de maíz y 15.000 de trigo), está sintiendo los efectos de la escasez de lluvias durante todo septiembre y de las pobres precipitaciones de agosto pasado.