Gestiones ante China para evitar que la balanza se vuelva negativa
Las cierran hoy enviados de Cancillería, en paralelo a medidas que estudia Peirano para frenar la ‘invasión’ de productos.
El Gobierno busca evitar por dos flancos lo que parece inevitable: que la balanza comercial bilateral con China arroje este año un saldo deficitario por primera vez desde el año 2000. Por eso, además de las barreras de protección a los sectores sensibles que el Ministerio de Economía prevé intensificar, la Cancillería cerrará hoy un acuerdo para que el gigante asiático incremente sus compras al país de productos industriales, que sólo representan un 20% de los envíos actuales.
Según informó a El Cronista desde Pekín el jefe de la delegación negociadora argentina, Néstor Stancanelli, el gobierno chino aceptó financiar la participación de firmas nacionales en una feria comercial sobre Latinoamérica que se realizará allí en noviembre. También aportará el contacto con los importadores de las provincias chinas a las que las compañías argentinas podrían aspirar a abastecer, a pesar de su gran tamaño.
Otro punto que incluirá el acuerdo es el envío de una misión inversa (de compradores asiáticos a la Argentina), que llegará en el primer trimestre del año próximo. En ambos casos se priorizarán los sectores ‘no tradicionales’ del comercio bilateral: los aceites y porotos de soja no necesitan promoción, debido a que en el Lejano Oriente adquieren todo lo que consiguen.