Especialistas insisten en que se pinchó la burbuja especulativa para los granos
La huida de los fondos especulativos, por las nuevas regulaciones, y la crisis financiera empujan al mercado de commodities agrícolas a regirse otra vez por la oferta y la demanda.
La crisis financiera internacional que golpeó a los fondos especulativos viene profundizando la baja de los precios de los commodities desde julio. En aquel momento, la CFTC (Commodity Futures Trading Commission) comenzó a regular la acción de los fondos de inversión en commodities agrícolas promoviendo su retirada, hecho que ofició como catalizador del derrumbe de los precios de granos y oleaginosas, cuyas cotizaciones bajaron un escalón que ya nadie cree que vuelvan a subir en el corto plazo.
Según el último informe granario de Aacrea, “en aproximadamente dos meses, los fondos especulativos pasaron de tener un saldo comprador de alrededor de 12 millones de toneladas (de soja), a tener un saldo de 3,2 millones de toneladas”. En el período, el precio pasó de superar los u$s 600 a acariciar los u$s 450 hasta mediados de septiembre. La intensificación de la crisis de las últimas semanas “ha hecho que muchos fondos especulativos busquen refugio en otros mercados”, indica el informe. Así, una soja de u$s 430 la tonelada cerró la fatídica semana pasada.
El éxodo de los fondos especulativos resultó, para algunos analistas, en un sinceramiento de los valores reales de los precios de los granos, generando un mercado que comenzó a regirse, y lo seguirá haciendo, por sus propios fundamentos.