Fuerte ingreso de dólares impulsó subas de hasta 5% en los bonos argentinos
Con tasas de retorno que rozan el 10% en dólares, la renta fija doméstica es una de las preferidas de aquellos dispuestos a tomar riesgo con tal de huir de las deprimidas rentas que pagan emisiones de EE.UU. y Europa.
Los defectos ajenos antes que las virtudes propias. Los problemas económicos de Estados Unidos y Europa, la decisión (japonesa) de deprimir los intereses que pagan los bonos japoneses para reactivar las esperanzas (japonesas) y la estampida de capitales inversores a zonas menos agoreras y que ofrecen mejores rendimientos, han dibujado un mapa que garantiza una performance atractiva para el inversor de los activos locales o, lo que es una peregrina traducción, lluvia de dólares que van a buscar rentabilidades importantes. En ese contexto, y a pesar de la elevada incertidumbre que denota un riesgo país por encima de los 600 puntos básicos, los bonos argentinos son -y serán- los grandes ganadores de los próximos meses. La noticia es que, a la hora de los pronósticos, y quizás ahora más que nunca, los títulos públicos locales están ‘condenados‘ al éxito. Al menos eso creen los máximos especialistas en renta fija local, quienes acostumbrados a los embates cíclicos de un mercado siempre volátil, no son habitué de un optimismo a toda prueba.
Ayer, en una jornada que regaló recortes en los indicadores bursátiles, se tuvieron subas de hasta 5% en algunas emisiones en bonos locales. Fue el caso del Par en pesos mientras que el Cuasi Par en pesos también subió 4,1%. El Bonar 2015 ganó 1,34%, el Boden 2014 trepó 1,32%. Para los bonos en dólares, la mayor suba operó en el Bonar VII, que avanzó 1,5%.