El club de los países triple A y la expulsión del paraíso
All people are born alike... except Republicans and Democrats”, decía Groucho Marx. “Todas las personas nacen iguales, salvo republicanos y demócratas”.
Fue una lenta agonía de debates ásperos y tironeos partidarios. Pero sobre el filo el acuerdo parece cerrado. Estados Unidos evitaría el default pero su pertenencia al club de los triple A todavía corre peligro.
Sólo 17 países en el mundo tienen la máxima calificación crediticia tanto de Standard & Poors como de Moodys, desde Alemania, Suiza, Francia y Canadá hasta Suecia, Singapur y la ignota Isla de Man, dependencia de la corona británica frente a la costa de la castigada Irlanda. La triple A indica básicamente el máximo grado de seguridad del emisor. O dicho de otra manera, la medida más alta de confianza, ese intangible tan volátil y tan crucial.