No se fertiliza la soja y pierde el suelo
Según Fertilizar, los bajos índices de reposición de nutrientes, especialmente fósforo, y el esquema de cultivo de soja sobre soja ya les están pasando la factura a los suelos locales.
Así, según destacó Fertilizar, el 70% de la agricultura argentina se desarrolla sobre suelos deficitarios en fósforo y el nivel de fertilización es inferior al necesario, por lo cual los suelos se empobrecen y van cayendo paulatinamente en rendimientos.
"Sembrar sin fertilizante en los suelos que están debajo de los niveles críticos de fósforo genera menos rendimientos. No sólo estamos perdiendo más rendimiento en soja, sino que a su vez, emprobecemos nuestros suelos, volviéndolos no aptos para la agricultura a futuro. Este es un pésimo negocio, ya que perdemos rentabilidad en el corto plazo e hipotecamos nuestro futuro", comentó Pablo Pussetto, presidente de Fertilizar.
De acuerdo con Pusetto, para poder alcanzar los resultados deseados en soja sin degradar en forma irreversible los suelos, se debe aplicar al menos el doble del volumen de fósforo que se usa actualmente en la Argentina.
"Si bien la soja responde a la fertilización mucho más que diez años atrás, de acuerdo con nuestros relevamientos, muchos productores aún no lo comprobaron. Por eso hay muchos agricultores que alquilan un campo y no fertilizan, o lo hacen en índices bajos. Así se van deteriorando los suelos y encontramos que zonas adonde antes nunca había problemas de fósforo, ahora los hay, como en el norte de Buenos Aires", acotó Jorge Bassi, vicepresidente de la entidad.
Además, según Fertilizar, están en alerta roja por el déficit de fósforo Córdoba, Santa Fe y La Pampa.