Un fuerte aumento en los alimentos impulsó la inflación de 2013 a cerca del 28%

Lejos, muy lejos del 10,5% que informaría el Indec la próxima semana como dato de la inflación de 2013 , el índice de precios al consumidor habría registrado el año pasado un aumento promedio de 28%.

Un fuerte aumento en los alimentos impulsó la inflación de 2013 a cerca del 28%
10deEnerode2014a las07:04

Lejos, muy lejos del 10,5% que informaría el Indec la próxima semana como dato de la inflación de 2013 , el índice de precios al consumidor habría registrado el año pasado un aumento promedio de 28% y de más de 30% en el caso de los alimentos, según economistas consultados por LA NACION. Mientras tanto, el Gobierno aparece desorientado en torno de las medidas necesarias para bajar los precios: en sólo 48 horas se contradijo en torno de la necesidad o no de importar un producto como el tomate que, según sus productores, no registra faltantes.

La ex directora del IPC del Indec hasta el comienzo de la manipulación de las estadísticas públicas en 2007, Graciela Bevacqua, estimó que la suba de precios fue de 27,4% en 2013, con sendos incrementos de 33% en alimentos y bebidas, y en transporte y comunicaciones. Esto derivó en incrementos en la canasta básica alimentaria de 43% y de 45% en la canasta básica total, según la especialista. En particular, su cálculo de diciembre último fue de 2,9% a nivel general; 3,9% en alimentos; 2% en transporte; 4,9% en esparcimiento; 3,6% en equipamiento del hogar y 3,2% en atención médica.

Dado estos aumentos, indicó Bevacqua, la Asignación Universal por Hijo perdió 21% de poder de compra respecto de su lanzamiento.

En el sector formal, el panorama no fue mejor. Como lo señala un informe del Banco Ciudad, la pérdida del salario real fue de 2% en 2013, "en lo que sería su segunda y más pronunciada contracción desde 2007, luego de las alzas registradas entre 2008 y 2011". Para el Ciudad, el aumento de precios superó el 3% el mes pasado. Al respecto, la entidad que preside Rogelio Frigerio sostuvo que "lo más preocupante de esta situación es que se acumularían dos años consecutivos de deterioro, que podrían ampliarse a tres en 2014".

"Este comportamiento de los salarios reales atenta contra el avance del consumo", concluyó el paper.