Las medidas casi no bajarán el déficit, pero afectarán el consumo
Tendrán un efecto mínimo sobre el déficit energético del país y no generará ahorro fiscal, según un informe privado, pero sí impactará negativamente sobre el consumo privado.
El anuncio de ayer sobre recorte de subsidios en gas y agua tendrá un efecto mínimo sobre el déficit energético del país y no generará ahorro fiscal, según un informe privado, pero sí impactará negativamente sobre el consumo privado.
El estudio del economista Diego Petrecolla, presidente de la consultora GPR Economía, indica que, con las nuevas medidas, el rojo energético llegaría a US$ 6100 millones, frente a US$ 6700 millones del año pasado, con una reducción cercana al 0,5% del PBI respecto del 5% registrado en 2013. Si bien en estas páginas se justifica la necesidad del gradualismo en la aplicación de la suba de tarifas y del retiro de los subsidios, este informe detalla la verdadera magnitud del ajuste.
Petrecolla dijo a LA NACION que "el Gobierno seguirá aumentando las tarifas en etapas y tratará de reducir los subsidios a aquellos que mayores ingresos tienen, pero eso es bastante más difícil de implementar de lo que se cree" en los hechos.
Esta estrategia de recorte gradual "no contribuirá a reducir los subsidios en la magnitud que se necesita". Los subsidios alcanzaron 24.000 millones de dólares (5,3% del PBI) en 2013, de los cuales 17.000 millones corresponden al sector energético. Del total de subsidios asignados por el Estado, cerca de 80% correspondieron al sector energético.