La relación Ser Humano y Leche mantiene su valor desde los inicios de la civilización
En el marco del Día Mundial de la Leche, conmemoración instaurada por la FAO, la Federación Panamericana de Lechería – FEPALE, invita a celebrar este día levantando y brindando con una copa de leche como símbolo de bienestar y salud.
Desde hace más de 10.000 años, el ser humano fue dejando su hábito de vida nómade afincándose en pequeñas comunidades agrícolas, comenzando a trabajar la tierra y a domesticar animales que les provean alimentos.
Es así que nacieron los primeros rebaños de pequeños mamíferos destinados al ordeñe (cabras y ovejas), posiblemente primero para mantener a las crías de estos animales y obteniendo un sobrante de leche para la alimentación humana.
A partir de ese momento, la leche se ligó definitivamente a la historia de la civilización incorporándose a la cultura de muchos pueblos en diferentes épocas, generando así una relación inseparable y positiva entre ese noble producto y el Ser Humano.
En diferentes lugares del mundo se fue consolidando la relación del hombre con mamíferos que le proveían de leche: la cabra y la oveja en medio oriente, el reno en la región ártica y en Alaska, el yak en Asia Central, el camello en Arabia y en el desierto del Sahara, y la vaca en Europa y Asia.
En la región de Ur (Medio Oriente) se encuentran los bajorrelieves que muestran el ordeñe de vacas y elaboración de subproductos, los cuales datan del 3.500 AC.