El agua, un factor clave en la ganadería
Consejos para manejarla bien en las zonas semiáridas en las que crece la actividad. Las chances de la recría.

En los últimos años, corrida por la agricultura, la ganadería sigue ganando nuevas zonas, como la sub-húmeda o semiárida al oeste de la Pampa Húmeda. Allí, determinar cómo usar lotes con menor capacidad de retención hídrica es un dato central para lograr una buena producción de pasto y tener un buen negocio.
Alberto Quiroga, técnico de INTA Anguil (La Pampa), sostiene que, en suelos muy arenosos, en los que el crecimiento del pasto invernal es deficiente debido a la estacionalidad de las lluvias, concentradas en el verano, es clave “gestionar la ganadería desde la producción de forraje”.
Justamente en uno de esos ambientes, en Villa Mercedes, en el centro-oeste de San Luis, se llevó a cabo una jornada de actualización técnica del IPCVA en la que participó el experto, quien explicó que en las zonas semiáridas hay que monitorear permanentemente la disponibilidad de agua para tomar la decisión de sembrar un verdeo o una pastura consociada.