Paros atentan contra la principal fuente de divisas
La paralización de la actividad portuaria como recurso negociador atenta contra la principal fuente generadora de divisas. En lo que va del año los conflictos vienen creciendo.
En lo que va del presente año una serie de conflictos gremiales está generando problemas logísticos de manera recurrente al momento de embarcar los commodities agrícolas de los que depende la economía argentina.
Si bien los conflictos gremiales pueden ser considerados “normales” en períodos de alta inflación, el hecho es que los dirigentes sindicales se acostumbraron a paralizar la actividad portuaria para acelerar los tiempos de las negociaciones con las empresas o incluso con otros gremios.
La paralización de actividades portuarias, además de generar un infierno logístico por la “acumulación” de barcos con carga programada, promueve una ralentización del ingreso de agrodivisas y costos adicionales que luego –descontados del valor FOB– son eventualmente redistribuidos entre los integrantes de la cadena comercial (cada día de espera no programada de un buque granelero ronda actualmente los 14.000 dólares).