USDA: vuelve a aumentar producción de soja y maíz en Estados Unidos

Los primeros datos del informe mensual del USDA indican un aumento en la proyección de cosecha de la oleaginosa y el forrajero en Estados Unidos, aunque en una cuantía menor a la esperada.

10deOctubrede2014a las12:49

El Departamento de Agricultura de Estados Unidos dio a conocer los datos del informe de oferta y demanda mundial. De acuerdo a lo publicado, aumentaron las estimaciones de producción de soja y maíz aunque por debajo de lo esperado. Asimismo, y en línea con lo estimado, se redujo la proyección de área cosechada para la oleaginosa y el forrajero.

Las estimaciones de producción de soja y maíz en nuestro país se mantuvieron sin cambios con respecto al informe anterior. Sin embargo, en cuanto al cultivo de trigo, el organismo redujo las estimaciones de producción.

SOJA

El USDA ajustó al alza sus estimaciones de producción y rindes para Estados Unidos dejándolas en 106,9 millones de toneladas  31,7 qq/ha respectivamente. Estas variaciones, sin embargo, fueron menores a las estimaciones promedio previas del mercado. Adicionalmente, en el caso de la proyección de área cosechada en el país del norte el organismo redujo dicho guarismo en línea con las expectativas previas de los analistas dejándolo en 33,8 millones de hectáreas. El aumento de la estimación de producción 14/15, sin embargo, fue superado por el recorte de los inventarios iniciales (el consumo interno 13/14 aumentó más que la producción) lo que desembocó en una menor oferta total de este commodity de la nueva campaña .

Por el lado de la demanda del ciclo 14/15 no hubo correcciones en los valores de exportaciones y procesamiento. Por ello, con una oferta menor que la del mes anterior y sin modificaciones por el lado de la demanda, los stocks de la nueva campaña de soja fueron recortados pasando de 12,9 millones de toneladas a 12,2 millones en un nivel mayor al esperado.

A nivel mundial, el USDA ajustó al alza su proyección de cosecha para el ciclo 14/15 como consecuencia del incremento en las producciones de Estados Unidos y la Unión Europea que superaron las reducciones de China y Rusia. Este aumento por el lado de la oferta en conjunto con la caída de la demanda (menos consumo interno y exportaciones) hizo subir las existencias finales globales de la oleaginosa que llegaron a los 90,7 millones de toneladas.