Devaluación brasileña deja fuera de competencia a muchos productos agropecuarios
Buenos Aires, Cuyo y Río Negro son las regiones más comprometidas.
El tipo de cambio en Brasil alcanzó el nivel más elevado de la última década.
Se acabó la era de los commodities. En ese marco muchas naciones exportadoras de materias primas están devaluando sus monedas para intentar adaptarse al nuevo orden. Tal es el caso de Brasil.
El real brasileño ayer llegó a los 2,83 R$/u$s: el tipo de cambio más elevado de los últimos diez años. Tal devaluación –si se sostiene o profundiza en el transcurso del presente año– promoverá la competitividad de las exportaciones brasileñas. Pero también contribuirá a encarecer las importaciones.
La mala noticia es que algunos productos agropecuarios argentinos, al ser extremadamente dependientes del mercado brasileño, podrían experimentar una menor demanda externa ante la pérdida del poder de compra presente en el principal socio del Mercosur.