Trigo y maíz: víctimas del agua
Producto de las abundantes precipitaciones acumuladas, los cultivos y las tareas de cosecha se han visto perjudicadas. Por un lado, el área implantada con trigo podría sufrir importantes pérdidas; por el otro, la recolección de maíz se vio interrumpida.
Un importante volumen de precipitaciones acumuladas desde inicios de mes, ha provocado anegamiento de extensas áreas sobre gran parte del sector este y noreste de Buenos Aires, centro y sur de Santa Fe y también en sectores de Entre Ríos.
Varias localidades de estas regiones acumularon durante los primeros 10 días de agosto precipitaciones por encima de los 300 mm, afectando en mayor medida campos bajos o próximos a los cursos de agua, que en la actualidad se encuentran totalmente desbordados.
Si bien aún es imposible cuantificar las pérdidas sobre el área implantada con trigo, debido a que el frente de tormenta aún no finalizó y en paralelo muchos productores no pueden ingresar a sus campos; si podemos prever que las regiones más comprometidas y en donde se registra el mayor porcentaje de pérdidas, son nuestras zonas Núcleo Sur y Cuenca del Salado. Ambas zonas aportan en conjunto poco menos de 300.000 hectáreas sembradas, cifra que equivale al 8 % de las 3.700.000 hectáreas implantadas a nivel nacional durante la campaña en curso.
Específicamente algunas localidades de la región Núcleo Sur presentaban napas freáticas con niveles elevados desde hace varios meses, incluso con ambientes bajos anegados que en su momento restringieron la siembra de cereales de invierno. Al presente informe y luego de haber acumulado en algunos casos precipitaciones por encima de los 300 mm en poco más de diez días, la situación de la región es crítica.