El Gobierno reemplazó las DJAI por nuevas barreras burocráticas para frenar importaciones
Aunque la Argentina devaluó su moneda y decidió cambiar el régimen que deben cumplir los importadores, será difícil que se protejan todos los sectores.
Fijan un plazo máximo de 10 días para autorizar importaciones.
Barreras burocráticas y dólar caro. Las dos medidas protegen la industria nacional de cualquier país. Sin embargo, aunque la Argentina devaluó su moneda y decidió cambiar el régimen que deben cumplir los importadores, será difícil que se protejan todos los sectores.
Es que el sistema que ayer eliminó el Gobierno, las famosas DJAI (Declaraciones Juradas Anticipadas de Importación), creadas por el ex secretario de Comercio, Guillermo Moreno, que regían desde 2012 funcionaban como un filtro efectivo para frenar todo tipo de importaciones, pero al mismo tiempo también se convirtieron en un dolor de cabeza para los importadores, incluso para los que necesitaban importar para producir en el país. El kirchnerismo las había diseñado cuando la inflación había erosionado el tipo de cambio competitivo y la consecuencia era la pérdida constante de reservas.
Ahora, el Gobierno de Mauricio Macri reemplazó las DJAI por el "Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones (SIMI)". La medida no es caprichosa. De hecho, el Ejecutivo se encolumna con el fallo de la Organización Mundial de Comercio (OMC), que exigió al país suprimir trabas a la importación ante una demanda de Estados Unidos, la Unión Europea y Japón.