La burocracia, contra el valor agregado
El principal escollo que encuentran los emprendedores es las intrincada legislación que existe para cada sector de la economía.
|El desaliento a la iniciativa privada se evidencia cuando los empresarios llegan a la conclusión de no invertir.
Tan importante como nuestra nueva inserción en el mundo, como un país normal en el que dos más dos son cuatro y mano dentro del área es penal, es la solución de los problemas que tienen los empresarios medianos o pequeños para cumplir con todos los requisitos que se le imponen, a veces sin sentido, desde todas las reparticiones que tienen algo que ver con la actividad.
A pesar de la insistencia declamada en cuanta oportunidad tienen los funcionarios de los estados provinciales y nacionales relativo a la necesidad de agregar valor en origen, el principal escollo que encuentran los emprendedores es las intrincada legislación que existe para cada sector de la economía.
El desaliento a la iniciativa privada se evidencia cuando los empresarios llegan a la conclusión de no invertir por el desgaste personal que significa cumplir con infinidad de requisitos burocráticos que pocas veces tienen sentido real. Al margen del claro efecto sobre la competitividad, la complejidad de la burocracia se convierte en enemigo del emprendedurismo.
Da la impresión de que los funcionarios viven en otro país, desconocen las reglamentaciones y los que manejan realmente el país son los estamentos intermedios en los ministerios y reparticiones.