"La Niña" y "El Niño" se disputan la campaña

De acuerdo a estimaciones de Eduardo Sierra, publicadas en el informe estacional de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, el fenómeno de “El Niño”, que ha dejado consecuencias más que evidentes, aún se resiste a retirarse. “La Niña” intenta avanzar mientras “El Niño” se opone.

Precipitaciones observadas durante mayo 2016.

Precipitaciones observadas durante mayo 2016.

07deJuniode2016a las14:54

Durante la primera parte del otoño 2016, “El Niño” conservó considerable intensidad, produciendo una intensa racha de tormentas, que causó severos daños y atrasó las labores agrícolas.

El inicio de las entradas de aire polar observado en los últimos días de Abril moderó considerablemente la actividad meteorológica, dando paso a un escenario climático mucho más moderado, aunque no exento de riesgos.

El reciente debilitamiento de “El Niño” redujo significativamente los riesgos de inundaciones y anegamientos para el final de la campaña agrícola 2015/2016, mejorando las condiciones para el avance de la cosecha, aunque las pérdidas ya producidas son cuantiosas y no podrán recuperarse.

Paralelamente, la disipación de “El Niño” abrió paso al posible desarrollo de un episodio de “La Niña”, que ha pasado a constituir la hipótesis favorecida por la mayor parte de los servicios meteorológicos del Mundo, a excepción del Servicio Meteorológico Australiano.

No obstante, las elevadas reservas de humedad dejadas por “El Niño”, así como su acción residual, mitigarán en buena medida los efectos depresores de las lluvias que suele producir “La Niña” en el este del área agrícola, minimizando sus impactos negativos.