El girasol está de vuelta en las rotaciones competitivas
La oleaginosa es uno de los cultivos que más espacio había perdido en el oeste bonaerense. Los productores y técnicos ahora lo ponderan.
|El girasol vuelve a las rotaciones con más inversión en tecnología.
Comenzó la campaña de girasol y la siembra del cultivo viene bajando de norte a sur del país. Una de las tradicionales zonas girasoleras, el oeste bonaerense, está próxima a iniciar la campaña. Por eso, productores y técnicos ya se alistan para las tareas y le cuentan a Clarín Rural sobre la vuelta de la oleaginosa a las rotaciones.
En Trenque Lauquen, se reunieron cuatros productores girasoleros que renovaron sus expectativas con el cultivo para esta campaña. Ellos ponderan la importancia de este cultivo como una herramienta de diversificación y hablan de las expectativas y los desafíos para esta campaña.
Jorge Harguindegy es asesor técnico para una empresa con base en América, más la siembra de otros campos en Bolívar y Saliqueló, todos en Buenos Aires, también en el este de La Pampa y en el sur y norte de Entre Ríos.
Según el técnico, una de las mayores preocupaciones en la planificación y para encarar la siembra de un cultivo competitivo esta campaña es que no hay un valor de referencia. “Las empresas pagan un precio de futuro que sigue siendo menor que la soja y teniendo en cuenta que el girasol ya no tiene retenciones”, explica el técnico.
De esta forma, dice que termina ocupando un lugar en la rotación dentro los peores ambientes, tampoco se puede determinar crecer en el área sembrada o decidir la aplicación de más tecnología.
Uno de los temas importantes que está caracterizando la campaña es la confianza de los productores para seguir pensando en la coyuntura o hacerlo definitivamente en el largo plazo, teniendo en cuenta que el contexto cambió.
De acuerdo a Harguindegy, “todavía está muy metido en toma de las decisiones del productor el corto plazo, por eso hay poco interés en las inversiones. Es cierto que la visión de este año no es la del año pasado, pero de ahí a pensar en cambios estructurales aun falta mucho”, aclara.