Mercado dividido entre una mayor oferta mundial y una demanda activa

El USDA volvió a incrementar los rindes estimados de la campaña norteamericana y en Brasil se espera mayor producción. A la par, las importaciones chinas de poroto de soja van en aumento.

En la Argentina la trilla del cereal avanza a buen ritmo pero a fases muy primarias, con alrededor del 8% del total. Además, el programa de embarques recién comienza.

En la Argentina la trilla del cereal avanza a buen ritmo pero a fases muy primarias, con alrededor del 8% del total. Además, el programa de embarques recién comienza.

13deNoviembrede2017a las08:21

El mercado de granos se encontró la semana pasada con una nueva sorpresa del lado del USDA. Los rindes de Estados Unidos fueron incrementados nuevamente, mientras que los stocks de soja no bajaron tanto como se esperaba, y a nivel internacional subieron con más producción de Brasil. Sin embargo del otro lado las señales de la demanda siguen muy activas. Pero no sólo en soja, donde el USDA ya incrementó importaciones esperadas para este país, sino también en maíz, donde las exportaciones semanales de EE.UU. fueron muy buenas.

En el caso del maíz el rinde estimado para el ciclo 17/18 subió a 110,1 quintales por hectárea superando así el récord del año pasado de 109,6 quintales. Esto llevó a un aumento en la producción esperada de casi 8 millones de toneladas, dejándola 6,2 por encima de lo que los analistas esperaban. Sin embargo los stocks sólo subieron 3,8 millones versus el reporte previo. Esto porque también se incrementaron las exportaciones y el consumo interno.

Contrarrestando datos las exportaciones semanales de este país estuvieron en casi 2,4 millones de toneladas superando las 0,5 a 0,7 millones esperadas. Lo que resulta positivo para Estados Unidos no lo es tanto para Argentina, ya que implica mayor competencia para colocar nuestros excedentes productivos.

En cuanto a la soja las variaciones de los datos con respecto al mes anterior fueron mínimas. Pero los analistas se habían formado una expectativa de que la producción bajara 600.000 toneladas y los stocks 300.000. Por todo esto la reacción ante el informe fue negativa.