Estrés térmico en animales: durante cuatro días el ITH se mantuvo por encima del nivel crítico
Para monitorear cuando el animal sale de su rango de temperatura de confort o bienestar, se elaboran distintos índices biometeorológicos que sirven para cuantificar el estrés.
Monitoreo del estrés térmico en animales.
Los seres humanos no somos los únicos afectados por las elevadas temperaturas. Los animales también pueden padecer el calor, especialmente si la situación meteorológica viene acompañada por elevados valores de humedad relativa.
Los mamíferos y las aves, por ser animales homeotermos, pueden mantener constante su temperatura corporal dentro de ciertos límites. Pero, si la atmósfera está muy caliente y húmeda, se reduce la eficacia de sudar o jadear para enfriarse, y comienzan a manifestar estrés calórico. Si esta situación persiste, puede desencadenar desde problemas de salud y menor rendimiento productivo, hasta disminución de la fertilidad, abortos y muerte.
Para monitorear cuando el animal sale de su rango de temperatura de confort o bienestar, se elaboran distintos índices biometeorológicos que sirven para cuantificar el estrés. Uno de los más usados para el ganado vacuno es el Índice de Temperatura y Humedad (ITH), que establece que la zona de confort térmico para el bienestar animal se encuentra en valores de ITH de entre 35 y 70, y el valor crítico se alcanza con un ITH de 72.