Para 6 cultivos y en plena pandemia, productores invirtieron US$ 10.000 millones: cómo se financian
Tarjetas para el agro y financiamiento por forward cedidos (en U$S) fueron solo algunas de las herramientas.
En Argentina, la necesidad de inversión para la siembra de cada campaña agrícola supone un desembolso inicial que, según el promedio de las últimas 5 campañas, los 10.000 millones de dólares para los 6 cultivos principales.
Al mismo tiempo, se ha invertido un promedio de US$ 313 por hectárea desde el ciclo 2016/17 hasta la 2020/21 para la siembra, pulverización y los insumos de los diferentes cultivos.
Los datos surgen de un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR): "Se debe destacar que el presente estudio se basó en datos y estimaciones de las campañas 2019/2020 y 2020/21, atento a que los costos varían ante cada campaña, así como la fuente de financiamiento para afrontar los mismos: fondos propios o financiamiento de terceros".
Una de las características distintivas de la actividad agropecuaria es que es posible conocer el nivel de egresos al inicio del ciclo productivo, pero no sucede lo mismo con los ingresos. Esto diferencia considerablemente al rubro frente a las demás actividades.
"En la producción agrícola se conoce de antemano cuál es la inversión necesaria (suma de erogaciones en siembra, pulverización e insumos por ejemplo) pero no cuál será el resultado final al efectivizar la cosecha", cita el relevamiento de Federico Di Yenno, Alberto Lugones, Sofía Corina y Emilce Terré.
Esta incertidumbre respecto a los ingresos futuros opera como factor clave a la hora de gestionar una explotación agrícola y su riesgo.
Además, la incertidumbre afecta al acceso al crédito y al costo de dicho financiamiento para los productores. Esto, sumado a los diferentes contextos macro y microeconómicos genera variaciones en la participación de cada una de las múltiples fuentes de financiamiento sobre el volumen de crédito total.