Lenguaje inclusivo: el INTA publicó un manual con recomendaciones y abrió el debate

El organismo elaboró una guía de buenas prácticas de uso del lenguaje y recibió críticas.

30deMarzode2021a las10:03

Hablar de “lenguaje inclusivo” en cualquier ámbito puede generar controversia. Si ese debate se origina al interior de un organismo público, el revuelo suele ser aún mayor. Eso sucedió ayer en las redes sociales, cuando salió a la luz el manual de “Recomendaciones para el uso del lenguaje inclusivo”, elaborado por el INTA, que inmediatamente hizo eco en forma de críticas por parte de varios profesionales del agro, muchos de ellos empleados del organismo.

Según expresan desde el INTA, el manual de buenas prácticas pretende ser “un aporte más a este recorrido legal y a las acciones que se vienen desarrollado en nuestro país por diferentes colectivos, organizaciones y actores políticos”. Y aclaran que “se trata de una herramienta que pueda establecer bases comunes de trato igualitario, recomendaciones que no buscan ser restrictivas, sino que intentan sumar prácticas igualitarias, acorde a la responsabilidad que nos exigen los nuevos escenarios y priorizando las posibilidades de expresión y representación de todas las voces”.

Hablar de inclusión en el lenguaje va en línea con una institución que abarca un sector que viene trabajando hace tiempo para lograr la igualdad de género, y que hace poco nombró a una mujer como presidenta (Susana Mirassou).

Una “payasada”

Sin embargo, el trabajo no fue interpretado así por muchos integrantes del sector, quienes inmediatamente salieron a reprobar el documento. Fue el tuit de Mariano Luna, ingeniero agrónomo con gran influencia en Twitter y quien además trabaja en el INTA, el que disparó el debate tratando el manual como una “payasada”.

Entre las críticas, surgió el muchas veces reprobado uso de la “E”, que por el contrario a lo que muchos pensaron, el INTA no recomienda usar:

“(...) independientemente de que estas formas suelen funcionar bien para la oralidad o mensajes escritos informales (whatsapp, redes sociales, etc.), son contraproducentes a la hora de amalgamar lenguaje inclusivo y coherencia gramatical”, reza el documento.