Cultivos de cobertura: cómo mantener la producción sin arriesgar el ecosistema

Los cultivos de cobertura representan un cambio de paradigma para la agroindustria: permiten mantener la producción sin poner en riesgo al ecosistema, traen beneficios al suelo y a los cultivos

01deJuniode2021a las10:07

En pleno tránsito de la temporada otoño-invierno, época del año en que termina el ciclo de las cosecha gruesa, Rotoplas Agroindustria te recuerda la utilidad de los cultivos de cobertura. No es una utilidad inmediata, de explotación: su objetivo es menos visible pero igual de importante. Se trata de una práctica a largo plazo que tiene la finalidad de aportar macro y micronutrientes al suelo y elevar su capacidad productiva, lo que en última instancia redunda en mayor productividad y mejores rendimientos.

Cuidado

El suelo tiene sus propios tiempos y es importante respetarlos para que estos no se degraden. Por eso, el sistema de cultivos de cobertura es la principal opción para llevar adelante una agricultura sostenible que permita mantener la producción de la agroindustria de manera sustentable, sin dañar el ecosistema.

En un sentido práctico, el proceso de los cultivos de cobertura consiste en sembrar el suelo, en su totalidad o en hileras, con especies de las familias gramíneas o leguminosas (frijoles, lupinos, maíz, lentejas, alforfón, entre otros) para proteger a los cultivos de las mala hierbas durante su crecimiento y, a su vez, realizar aportes en la fertilidad del suelo.