Sigman-Gold, el matrimonio que logra rindes extraordinarios: los secretos de las 100.000 hectáreas que producen en Argentina
Garruchos Agropecuaria es el brazo agro-ganadero del Grupo Insud, parte de una de las mayores fortunas del país
“Mi papá siempre me decía: ‘vos vas a ser empresaria’. Yo quiero ser científica, qué empresaria, le respondía”. Quien habla es Silvia Gold, científica y empresaria. Hija del Dr. Roberto Gold, fundador de Chemotécnica Sintyal y la fundación Mundo Sano.
Junto al padre de sus tres hijos, Hugo Sigman, Silvia forjó uno de los grupos económicos más grandes de la industria farmacéutica a nivel global con presencia en 46 países: el Grupo Insud.
Sigman-Gold y Garruchos, la pata agropecuaria de la familia
El matrimonio Sigman-Gold, dueño de una fortuna que Forbes llegó a estimar en US$ 2000 millones, que en parte quedó expuesta hace solo un par de semanas cuando se desprendió del 55% de mAbxience, su pata biotecnológica responsable de la fabricación de las vacunas contra el Covid de AztraZeneca en Latam (a cambio de US$ 548 millones), es también miembro del selecto club de empresarios argentinos con una fuerte presencia en el campo.
Garruchos Agropecuaria es el vehículo mediante el cual la familia, que también integran sus hijos, Leandro, Mariano y Lucas Sigman, agrupa alrededor de 100.000 hectáreas productivas repartidas en siete establecimientos en cinco provincias argentinas.
Desde la cría de Polled Hereford al pie de la Cordillera, pasando por la producción de carne, génetica y leche en la Pampa Húmeda, hasta la intensa actividad forestal en Corrientes -que canaliza a través de otra sociedad, denominada Pomera, con campos también en Paraguay- la presencia de la familia Sigman-Gold en el agro argentino está bien extendida.
El puntapié en los agronegocios lo dieron en 1998, cuando se hicieron del establecimiento Los Murmullos, en Cholila, Chubut, y sumaron las primeras 8200 hectáreas ganaderas. Sin embargo, fue en los últimos años que Garruchos Agropecuaria vivió su despegue y una verdadera transformación.
“Entre 2006 y 2015 se sumaron la mayoría de los establecimientos que permitieron incorporar más de 10.000 hectáreas agrícolas propias e incluso un tambo”, señala Patricio Juni, gerente de Garruchos Agropecuaria, en diálogo con Agrofy News. “Asimismo, hace siete años, la familia decidió avanzar con la agricultura de precisión y para eso se renovó el staff, se incorporó tecnología y se estudió cada m2 de suelo”, resume en pocas palabras lo que significó llevar los resultados a rindes extraordinarios.