Estrés calórico en vacas lechera: cinco claves para prevenir el impacto de las altas temperaturas
El estrés por calor también produce efectos negativos durante la preñez; prevenir el estrés calórico es también evitar perdidas económicas
El estrés por calor afecta los índices reproductivos del ganado lechero. Compromete el sistema inmune y provoca disminución del consumo de alimento.
Manejo del estrés calórico
Las vacas lecheras son más propensas a mastitis y metritis durante el verano debido al crecimiento bacteriano en tejidos y en ambientes semicerrados. El control del estrés calórico debería formar parte del plan sanitario de prevención en todo tambo.
El estrés por calor también produce efectos negativos durante la preñez; como resultado de la reducción del flujo sanguíneo al útero, se observa una reducción del volumen placentario, reducción del tejido fetal, partos tempranos, terneros débiles con bajo peso al nacimiento o muertos y baja calidad del calostro. Por lo tanto, el manejo de estrés por calor debe ser enfocado tanto a las vacas lecheras de alta producción como a las vacas secas.
Las vacas prefieren estar de pie para reducir la superficie corporal expuesta al sol o se agrupan bajo la sombra o cerca de fuentes de agua cuando la sombra no está fácilmente accesible.