Los productores sufren la cultura del abigeato

05deEnerode2000a las09:00
VILLA MINETTI, Santa Fe.- Los productores de esta región, motivados por la repercusión pública originada en el robo de ganado que aquí se investiga, y su directa relación con una banda -quizá la más importante que operaba en el interior- a punto de quedar totalmente al descubierto, admiten que una enraizada "cultura del abigeato" les ha ocasionado pérdidas varias veces millonarias en los últimos 30 años.

Las razones y las cuentas parecen muy claras. Una cosa es el robo típico de los llamados cuatreros, que se llevan uno o dos animales de un campo.

De ese robo "para freezer", como acá se conoce, hay a montones. Pero desde hace algunos años, la situación es más complicada. "Viene una banda, con camiones, camionetas y autos de apoyo, con fuerte armamento, y se llevan 150 animales de una sola vez", comentó a La Nación Hugo Lingua, un productor de Villa Minetti.

La referencia del interlocutor tiene un cometido: revela que los robos que se producen en territorio santafecino se alimentan de una suerte de multiprotección, ya sea policial, judicial o política, en la vecina Santiago del Estero, utilizada para provecho de algunos pocos.

"Llevo 27 años viviendo en Villa Minetti, y cuatreros hubo siempre, pero cuando un animal sale de acá y cruza hacia Santiago, olvidate: lo perdiste", dijo Lingua.

En esta provincia muchos siguen preguntándose si será factible que el juez que se decidió a encarar a fondo la investigación por los robos de ganado en esta zona pueda -finalmente- poner preso al considerado autor intelectual de estos hechos, el empresario de la carne y reconocido tropillero de los más importantes festivales de doma del país, Ramón "Kiko" Bárcena.

Sobre él pesa una orden de captura nacional e internacional, dictada por el juez de Instrucción de Tostado, Eladio García. Hasta anoche no había sido posible ubicarlo en sus propiedades santiagueñas.

"Nadie duda de que habrá protección para sus desplazamientos", especularon policías que días atrás lo buscaron en la vivienda de su propiedad, a dos cuadras del edificio de los Tribunales, en la capital de la vecina provincia, y que regresaron a Santa Fe convencidos que alguien les "sopló el objetivo".

Más zonas

Pero no sólo desde Tostado hacia el Norte (Villa Minetti, El Nochero, Pozo Borrado o Gato Colorado) se roba ganado. Han comenzado a aparecer denuncias de productores de los departamentos San Cristóbal y Vera, dando cuenta de situaciones parecidas y protagonizadas también por bandas organizadas.

En el caso de las primeras, el ingreso en los montes santiagueños está a sólo 20 kilómetros. La última población santafecina sobre la ruta nacional 34 (Ceres), se encuentra a sólo 8 kilómetros del límite con Santiago del Estero.

Pedro Villani, un productor con explotación agroganadera ubicada a 10 kilómetros de esta localidad, tiene para relatar su propia historia. A él le robaron 94 de los 98 animales que había preparado para vender. "Aunque es verdad que todo se muere cuando llega a Santiago, acá no hay muchos lerdos", reconoció.

De su análisis parte otro componente de la situación: la flexibilidad de las normas judiciales. "Se ha esclarecido una buena cantidad de robos, pero no hemos visto a ninguno de sus autores presos. Y estos que se dedican más a lo grande, menos. Esta gente, para hacer lo que hace y como lo hace, tiene muy buena protección", subrayó.

Juan Carlos Adrover, delegado de Federación Agraria Argentina (FAA) en la zona, también se quejó de las deficiencias de la estructura judiciales.

"Es tan deficitaria que un sólo juez penal, que reside en Rafaela, tiene a su cargo cuatro juzgados de instrucción diseminados por esa ciudad, San Cristóbal y Tostado. Como siempre está desbordado, nunca dicta sentencia, y, en consecuencia, o las causas prescriben o el abigeo anda suelto, porque tampoco hay reincidencia. Eso pasó con uno de los actuales detenidos, que estuvo 7 veces