Endeudados en dólares y asalariados, en problemas

03deEnerode2002a las08:22


De la Redacción de LA NACION

El esquema que impondría el gobierno de Eduardo Duhalde significa mantenerla convertibilidad con tipo de cambio fijo, pero con un valor de cambiosustancialmente más alto.

En teoría, los grandes beneficiados de esto serían los exportadores, quegastan pesos y recaudan dólares. Y los grandes perdedores serían quienesrecaudan pesos y deben dólares. Pero en ambos resulta una simplificación.

En el caso de los exportadores, como el mayor endeudado en dólares que sólorecauda pesos es el propio Estado, se deduce que volverán las retenciones, esdecir, un impuesto a las ventas al exterior.

Enrique Crotto, de la Sociedad Rural Argentina, vetó ayer a José Ignacio deMendiguren, presidente de la Unión Industrial Argentina, como candidato aocupar un eventual Ministerio de la Producción justamente porque advirtió queun gobierno que lo incluya volverá a gravar el comercio exterior.

La aplicación de impuestos a las exportaciones -fueron eliminados en 1991,cuando nació la convertibilidad- tendrá como objetivo apropiarse de parte dela renta empresarial y proveer al Estado de los dólares que necesita paracumplir con sus compromisos externos. De otro modo, aunque consiga una quitaimportante de capital e intereses en la renegociación de la deuda, estará peorque antes de empezar. Incluso sin retenciones, los exportadores sufriránperjuicios. Gran parte de la maquinaria y los insumos que utilizan sonimportados y pasarán a costar mucho más caros.

Agroquímicos, semillas de transgénicos e híbridos, vacunas, fármacos,tienen componentes o son totalmente extranjeros en muchos casos.

Las retenciones también podrían ser utilizadas como un modo de contener elaumento de precios de los productos exportables, que son en gran medidaalimentos.