Exigen compartir la nueva tecnología con los agricultores pobres
28deAgostode2002a las08:21
JOHANNESBURGO, Sudáfrica.- Los participantes a la Cumbre del Desarrollo Sustentable pidieron que sean compartidas con los agricultores pobres las nuevas tecnologías agrícolas, para así aliviar el hambre en los países en desarrollo.
La cumbre de 10 días, que comenzó el lunes, está centrada en la ayuda a los pobres y la protección del medio ambiente global.
"No tiene objeto tener niños sanos si van a morir de desnutrición", dijo Pedro Sánchez, ex director del Centro Internacional para la Investigación Agroforestal. "No tiene objeto ser un ambientalista con el estómago vacío".
Mientras tanto, los negociadores intentan llegar a un acuerdo sobre el plan de acción de la conferencia, que muchos delegados esperan contenga detallados calendarios para encarar los problemas energéticos, de la biodiversidad, seguridad alimenticia, agua potable y cuidados médicos.
Las naciones en vías de desarrollo intentan obtener más ayuda y mayor acceso a los mercados occidentales y tecnología. Estados Unidos se opone a nuevos cupos de ayuda o calendarios, al mismo tiempo que exige que los receptores de ayuda reduzcan la corrupción.
El centro de la conferencia fue acordonado con barreras de hormigón armado y cercas metálicas. Una fuerza policial de 8000 agentes se encarga de la seguridad para evitar episodios de violencia como los ocurridos en reuniones internacionales anteriores efectuadas en la ciudad norteamericana de Seattle y la italiana de Génova.
En la sesión del martes, muchos delegados se opusieron a las subvenciones agrícolas de la Unión Europea, por considerar que impiden a los agricultores pobres competir en el mercado mundial.
Sánchez recomendó que los países ricos que dediquen el 5% de sus ingresos a subvencionar la lucha contra el hambre en el mundo en desarrollo.
Unos 800 millones de personas padecen hambre anualmente y dos tercios de las tierras agrícolas del mundo sufren degradación ambiental.
Los delegados dijeron que las nuevas tecnologías en fertilizantes y otros sectores agrícolas podrían ayudar a paliar esa situación, aunque esos avances deben ser compartidos con el mundo en desarrollo.
"Podemos combatir el hambre inmediatamente", afirmó M.S. Swaminathan, especialista en agricultura sustentable.
Unos 150.000 agricultores pobres de Africa utilizan nuevas tecnologías sustentables y reposición del suelo y en consecuencia son mucho más productivos que sus vecinos, dijo Sánchez.
"Se puede lograr, señores. La cuestión es si tenemos la voluntad política para hacerlo", agregó.
La cumbre de 10 días, que comenzó el lunes, está centrada en la ayuda a los pobres y la protección del medio ambiente global.
"No tiene objeto tener niños sanos si van a morir de desnutrición", dijo Pedro Sánchez, ex director del Centro Internacional para la Investigación Agroforestal. "No tiene objeto ser un ambientalista con el estómago vacío".
Mientras tanto, los negociadores intentan llegar a un acuerdo sobre el plan de acción de la conferencia, que muchos delegados esperan contenga detallados calendarios para encarar los problemas energéticos, de la biodiversidad, seguridad alimenticia, agua potable y cuidados médicos.
Las naciones en vías de desarrollo intentan obtener más ayuda y mayor acceso a los mercados occidentales y tecnología. Estados Unidos se opone a nuevos cupos de ayuda o calendarios, al mismo tiempo que exige que los receptores de ayuda reduzcan la corrupción.
El centro de la conferencia fue acordonado con barreras de hormigón armado y cercas metálicas. Una fuerza policial de 8000 agentes se encarga de la seguridad para evitar episodios de violencia como los ocurridos en reuniones internacionales anteriores efectuadas en la ciudad norteamericana de Seattle y la italiana de Génova.
En la sesión del martes, muchos delegados se opusieron a las subvenciones agrícolas de la Unión Europea, por considerar que impiden a los agricultores pobres competir en el mercado mundial.
Sánchez recomendó que los países ricos que dediquen el 5% de sus ingresos a subvencionar la lucha contra el hambre en el mundo en desarrollo.
Unos 800 millones de personas padecen hambre anualmente y dos tercios de las tierras agrícolas del mundo sufren degradación ambiental.
Los delegados dijeron que las nuevas tecnologías en fertilizantes y otros sectores agrícolas podrían ayudar a paliar esa situación, aunque esos avances deben ser compartidos con el mundo en desarrollo.
"Podemos combatir el hambre inmediatamente", afirmó M.S. Swaminathan, especialista en agricultura sustentable.
Unos 150.000 agricultores pobres de Africa utilizan nuevas tecnologías sustentables y reposición del suelo y en consecuencia son mucho más productivos que sus vecinos, dijo Sánchez.
"Se puede lograr, señores. La cuestión es si tenemos la voluntad política para hacerlo", agregó.