Contra la negra realidad

30deSeptiembrede2002a las08:22

Además, indica que "la Libreta de Trabajo Rural que comenzará a entregar el RENATRE en pocos meses terminará con todo lo negro y negativo" de la actual realidad laboral del sector.

Los argentinos tenemos frente a nosotros la puerta de salida a la crisis que sufrimos desde hace varios años, y muchos no la ven. En realidad es una puerta y un camino que pisamos desde que somos Nación y antes también. Desde que los primeros pobladores de esta tierra decidieron pelear codo a codo con la Naturaleza y convertir sus frutos y animales en comida y bienes para producir y comerciar. Estamos hablando del campo argentino, que es nuestra primera industria nacional y nuestra principal fuente de empleo. Informes coincidentes del área económica del actual gobierno, de instituciones privadas y fundaciones así lo demuestran.

El sector agropecuario y agroindustrial aporta aproximadamente la mitad de los ingresos del país y genera directa o indirectamente el 43 por ciento de los empleos de la economía nacional. En lo que va del 2002 los exportadores han liquidado 5.000 millones de dólares. Son 5.000 millones más de posibilidades para que todos vivamos mejor de lo que estamos.

En recientes declaraciones periodísticas, Hans Tietmeyer, asesor de primer orden del Fondo Monetario Internacional, nos condenó a la insignificancia y posiblemente, según su expresión, para siempre. Actualmente, este país "insignificante", es el primer productor mundial de girasol, el tercero en el mundo de soja, el octavo en producción de alimentos y el quinto en exportaciones alimentarias. Duplicó su producción de granos en la última década y triplicó el volumen de sus exportaciones. El 78% de la producción primaria de la Argentina se exporta por todo el mundo.

Este sector tiene piso pero no tiene techo, podemos crecer y desarrollarnos en todos los órdenes, en la producción, la exportación, en la creación de empleo, generando así divisas para nuestro país. Tenemos que tener en claro que los enemigos están fuera del sector agropecuario, dentro del mismo estamos los que tenemos que convivir, los que tenemos responsabilidades compartidas para trabajar en el desarrollo político del sector, que está por encima de las ideologías políticas. El cambio se nota en todo el país con la puesta en marcha del Registro Nacional de Trabajadores Rurales y Empleadores (RENATRE).

Esta es la realidad desde la que partimos en el sector agropecuario, para preguntarnos a partir de allí qué nos falta para poder crecer de la mejor manera posible. Y los primeros interrogantes que surgieron fueron ¿quiénes somos?, ¿cuántos somos?, ¿con qué contamos para empezar a crecer y qué nos falta?.

Con el objetivo de la dignificación de la gente de campo, empezamos a trabajar desde la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE) hace nueve años para sancionar la Ley de Libreta del Trabajador Rural (Nø 25.191) y conversamos con los trabajadores rurales, los productores y los empleadores.

A partir de la sanción de esta Ley y la constitución del RENATRE, integrado por la Sociedad Rural Argentina (SRA), Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), Federación Agraria Argentina (FAA), y UATRE, estamos los máximos representantes del sector agropecuario sentados en una misma mesa. Desde este Registro será nuestro interés el desarrollo del sector, sobre todos los intereses particulares.

Pensado para constituirse en un organismo permanente, el RENATRE, tras mucho trabajo, tuvo primero fuerza de ley, y a partir de este año con la participación del presidente Eduardo Duhalde, empezó a estructurarse institucionalmente en todo el país.

Con la