Disputa por el ajuste por inflación
30deOctubrede2002a las08:13
En el tema de la reimplantación del ajuste por inflación impositivo, el empresariado se encolumnó detrás del proyecto de la diputada justicialista mendocina Elsa Correa, que reimplanta en forma integral el ajuste que fuera suspendido en 1992. Reclamarán que sea tratado sobre tablas en la próxima sesión de la Cámara baja.
Los tiempos son escasos, dado que están venciendo los plazos para las declaraciones juradas y pago del saldo del impuesto a las ganancias de muchísimas empresas. Si no se aprueba ahora la reimplantación del ajuste, habrá que solicitar la "repetición" (la devolución de lo pagado de más), lo cual es lento y no toma en cuenta el costo financiero.
La posición de Economía es distinta, ya que no quiere perder recaudación: busca reimplantar el ajuste para 2003, y que los pagos en exceso de 2002 se tomen a cuenta el año que viene. La AFIP, tras un dictamen de la Procuración del Tesoro, refirmó el criterio de que no hay ajuste por inflación a efectos impositivos, e instruyó a las empresas sobre cómo tienen que presentar las declaraciones juradas a fin de reflejar esa inexistencia de ajuste.
Una comisión de tributaristas designada por Economía, sugirió una solución intermedia, consistente en adoptar un índice atenuado de ajuste, o bien que se ajuste el saldo pero no así los anticipos ya pagados.
Según algunos expertos, si se admite el ajuste por inflación en ganancias, también tendrá que hacerse en los saldos del IVA, con lo que crecería la pérdida de recaudación. Si no se acepta la actualización, las empresas pagarán impuesto sobre falsas ganancias, o sobre el capital invertido, lo que se transforma en una desinversión.
Los tiempos son escasos, dado que están venciendo los plazos para las declaraciones juradas y pago del saldo del impuesto a las ganancias de muchísimas empresas. Si no se aprueba ahora la reimplantación del ajuste, habrá que solicitar la "repetición" (la devolución de lo pagado de más), lo cual es lento y no toma en cuenta el costo financiero.
La posición de Economía es distinta, ya que no quiere perder recaudación: busca reimplantar el ajuste para 2003, y que los pagos en exceso de 2002 se tomen a cuenta el año que viene. La AFIP, tras un dictamen de la Procuración del Tesoro, refirmó el criterio de que no hay ajuste por inflación a efectos impositivos, e instruyó a las empresas sobre cómo tienen que presentar las declaraciones juradas a fin de reflejar esa inexistencia de ajuste.
Una comisión de tributaristas designada por Economía, sugirió una solución intermedia, consistente en adoptar un índice atenuado de ajuste, o bien que se ajuste el saldo pero no así los anticipos ya pagados.
Según algunos expertos, si se admite el ajuste por inflación en ganancias, también tendrá que hacerse en los saldos del IVA, con lo que crecería la pérdida de recaudación. Si no se acepta la actualización, las empresas pagarán impuesto sobre falsas ganancias, o sobre el capital invertido, lo que se transforma en una desinversión.