Hacia los US$ 10.000 millones de reservas
La apertura del corralito tomará al Banco Central (BCRA) preparado para enfrentar un posible pico en la demanda de dólares.
Si la jornada cambiaria de ayer (la primera desde el anuncio) se toma como un indicio de lo que con el correr de los días se confirma como tendencia, la entidad monetaria llegará al próximo lunes con reservas por US$ 10.000 millones, un monto de alto valor psicológico y capaz de disuadir a los que intenten desatar una puja cambiaria.
Según el último dato disponible (al jueves pasado), en las arcas del BCRA hay US$ 9861 millones. Pero si a esa cifra se suman los US$ 42,7 millones que sumó entre el viernes y ayer como producto de la intervención cambiaria la tenencia llegaría ya a 9903,7 millones, en la medida en que no se hubieran hecho pagos en divisas.
De esta manera le restarían recuperar US$ 96,3 millones para volver a superar la barrera de 10.000 millones, un monto que abandonó hace poco más de cinco meses. Y del promedio que arroja el balance de las tres semanas previas surge que la entidad debería recuperar sin problemas otros US$ 94 millones en las cuatro jornadas hábiles que restan antes del día D, si se considera como tal a la fecha en que el corralito no existirá más. Por lo que se percibió ayer, a menos que algún hecho pudiera producir un brusco cambio en las expectativas, llegar a los 10.000 millones no debería ser problema. De hecho, con los US$ 37 millones que el BCRA recuperó ayer para su reservas la entidad se anotó el mejor arranque de semana en lo que va del mes sin que eso implique quebrar la suave tendencia a la baja que exhibe la divisa. Así ya lleva reincorporados a sus reservas US$ 413,7 millones en lo que va de noviembre.
Dólar, en repliegue
En tanto, la cotización del dólar en el mercado libre cayó ayer otro centavo para ubicarse en $ 3,54 la punta vendedora, en el contexto de una jornada que se caracterizó por una moderada demanda de divisas, un dato que hace pensar a operadores, banqueros y cambistas que la apertura del corralito no impactará sobre el tipo de cambio.
Ayer, el ente monetario compró US$ 52,2 millones, de los que volvió a vender 13,8 millones en el segmento mayorista y destinó 1,4 millón a abastecer el segmento de ventas minoristas por su cuenta y orden. Ese monto de compras es el más bajo de las últimas semanas, lo que revelaría que entre los operadores no provocó inquietud la decisión de desarmar de un golpe todas las restricciones impuestas hace casi un año a cuentas corrientes y cajas de ahorro.
"El mercado está tranquilo, porque no hay fondos que se estén volcando al dólar", explicó un cambista. "En el caso de un deterioro fuerte en las expectativas la liberación podría agregar un 30% más de liquidez a una corrida potencial", calculan en el Banco de Inversiones MBA, una porción que el BCRA podría atender sin que la cotización de la divisa muestre sobresaltos bruscos.
El único dato discordante lo da la importante suba en los saldos líquidos que los bancos acreditan en la cuenta corriente en moneda extranjera que tienen en el Central. Si bien este comportamiento puede explicarse porque se eliminó la retribución adicional sobre esos encajes desde octubre, hay quienes sostienen que podría también indicar mayor desconfianza respecto de la evolución futura del dólar, aunque lo relacionan más con los vaivenes en la relación con el FMI que con lo que acontecerá desde el lunes.
Sin embargo, las operaciones a futuro muestran lo contrario. Ayer todas las posiciones en el Rofex de Rosario cerraron con diferencias negativas y el índice dólar (Indol) aquí se mantuvo en $ 3,54 para el cierre de mes y cedió 0,26% para los contratos que vencen a fines de febrero de 2003, al pactarse a $ 3,75.
De la Redacción de LA NACION