Mujeres con marca registrada

Integran la Cooperativa de Trabajo Hogar Rural, que abarca buena parte del interior mendocino; su trabajo en red redunda en beneficio de la comunidad; por eso merecieron un premio a los recursos humanos de Dow AgroSciences

28deJuliode2003a las08:03

SANTA MARIA DE ORO, Mendoza.- El frío intenso no ha llegado y se retrasa la poda en los viñedos. Cuentan aquí que las plantas lloran. Y valdría la pena quedarse con esa imagen, sin más explicación. Pero enseguida las mujeres del campo indican que la metáfora tiene un significado preciso, más próximo a la biología que a la literatura. Ocurre que la savia todavía circula por las ramas y habrá que esperar que ese líquido elemental baje para cortar y atar las vides. 
 
En este pequeño pueblo del departamento de Rivadavia la quietud es sólo apariencia. Nadie diría que un grupo de mujeres prepara dulces y conservas en medio de este silencio, que va de las calles a los viñedos, y entra en las casas. Después se descubre que son más bien calladas, y que prefieren compartir su laboriosidad, entre ollas y frascos, antes que llenar con palabras el tiempo. 
 
Es justamente por la humildad de medios y la voluntad de generar sus propios ingresos en lugar de depender de la ayuda oficial que las mujeres de este pueblo, y de otros muchos, que forman parte de la Cooperativa de Trabajo Hogar Rural, recibieron un premio de la compañía internacional Dow AgroSciences. "Este premio que hemos sacado para la humanidad nos ha traído gran satisfacción", dice Carmela Zanni, una de las socias fundadoras. 
 
Y tiene razón, más que un premio al desarrollo humano en el sector agropecuario, es un premio para la humanidad. Fueron elegidas entre 28 proyectos de trabajo en red, como una de las mejores iniciativas del país. Quién discutiría, frente a su voluntad de superación y a las limitaciones que enfrentan, que su aporte a la comunidad redunda en beneficio de todos. Veamos la historia.