El FMI avaló a la Argentina, pero exige más reformas

El directorio aprobó en Washington la última revisión del acuerdo de transición. Hubo elogios por la estabilidad económica. Pero plantea condiciones severas para firmar un nuevo programa.

29deJuliode2003a las08:15

Ana Baron. WASHINGTON. CORRESPONSAL.

El directorio del Fondo Monetario Internacional aprobó ayer la tercera y última revisión de las metas establecidas en el actual acuerdo que vence en agosto durante una reunión en la que reinó un clima "constructivo y positivo".

Sin embargo, el titular del Fondo, Horst Köhler, advirtió que el gobierno del presidente Néstor Kirchner "necesita acelerar el trabajo respecto de las reformas estructurales en el próximo período". Aunque no descuidó elogiar los avances en la estabilización de la economía argentina.

La aprobación de la revisión desbloqueo automáticamente un desembolso por 1.050 millones de dólares que la Argentina utilizará para cubrir los vencimientos que tiene hasta finales de agosto.

Un funcionario que asistió a la reunión del directorio reveló: "No hubo las críticas virulentas que existieron en otras reuniones dedicadas a discutir el caso argentino. La reunión duró sólo una hora y cuarto. Es decir fue muy corta si se la compara con otras que duraron hasta tres horas y media". Y explicó que tampoco hubo problemas en otorgarle a la Argentina los waivers (perdones) que pidió por no haber cumplido algunas metas fiscales y reformas estructurales.

"Con esto dieron por terminada la transición. La negociación sobre el nuevo programa será dura, pero la atmósfera reinante es mucho más favorable a la que había cuando se negocio el acuerdo transitorio", agregó el funcionario

Al elogiar la situación económica, Köhler señalo en un comunicado que "la confianza del consumidor creció, la inflación bajó, los indicadores financieros se vieron reforzados, y la recuperación económica ha sido alentadora".

"Bajo el nuevo gobierno Argentina ha seguido cumpliendo con las metas fiscales y monetarias del acuerdo transitorio con márgenes confortables", dijo Köhler.

"La política fiscal ha superado las metas y hay espacio para exceder la pauta del superávit fiscal primario para el 2003", añadió. Y dio por descontado que el Gobierno deberá hacer un mayor esfuerzo fiscal en el futuro: "Las autoridades están comprometidas a mantener la disciplina fiscal. Y han realizado reformas importantes en la administración de los impuestos que facilitarán la transición hacia ahorros fiscales más altos, que serán requeridos en el mediano plazo para restaurar la solvencia de la finanzas públicas".

Esto significa que Köhler considera que hay espacio para un aumento del superávit primario (diferencia entre gastos e ingresos, sin computar el pago de intereses de la deuda), uno de los temas más conflictivos en la negociación del nuevo acuerdo. Mientras que el Gobierno quiere fijarlo en 2,5% del producto bruto interno, el FMI exige llevarlo al 4,5%.

El jefe del Fondo también elogió la ausencia de presiones inflacionarias, pero advirtió: "Sin embargo, las autoridades deben seguir vigilantes para mantener la inflación en el nivel de un dígito bajo".

Hacía mucho tiempo que el representante argentino ante el FMI, Guillermo Zocalli, no salía tan contento de una reunión de directorio. La aprobación de ayer da luz verde oficialmente al inicio de las negociaciones para la firma de un nuevo acuerdo por tres años. El optimismo también se reflejó en las declaraciones que formuló el ministro Roberto Lavagna desde Canadá, donde se encuentra participando de una reunión sobre la integración económica continental (ver recuadro).

Köhler incluyó en el comunicado una lista detallad