Default: un optimista de Wall Street

Seminario sobre la deuda.

06deAgostode2003a las08:37
Soy optimista respecto de Argentina y lo que sigue para el futuro". En esos términos empezó el asesor internacional de inversiones Walter Molano, socio de BCP Securities, su participación en la mesa redonda organizada por el diario El Cronista sobre el tema "Qué pueden esperar los tenedores de bonos". Molano reconoció que "muchos de los errores del pasado se hicieron con la complicidad de nosotros, analistas de Wall Street, y el FMI". En particular, no se tomó en cuenta que la economía argentina depende mucho de las commodities (materias primas), lo que le trae falta de flexibilidad. Pero ese factor ha sido superado, subrayó Molano, porque hoy la economía argentina recuperó flexibilidad en lo cambiario y en lo laboral. Incluso manifestó que no es tan negativo que Argentina todavía no tenga plan económico para presentar al FMI, porque eso da oportunidad a la economía del país a encontrar su propio camino.

Al sumergirse en el tema de la reestructuración de la deuda, apuntó que "Argentina tiene 12 a 18 meses para preparar la propuesta" y en ese sentido planteó dos escenarios: si Argentina pide más quita tendrá menor acceso al mercado de capitales, pero si pide menos quita este acceso será más rápido. Consideró Molano que ésta no es una decisión que deba tomar el Gobierno solo sino que "debe ser objeto de un debate social". Si fuera por él, por Molano, se inclinaría por la posición de pedir más quita pero cree que finalmente se escogerá la segunda.

El abogado Eugenio Bruno, quien analizó la reestructuración desde el punto de vista jurídico, manifestó su desacuerdo respecto de Molano planteando que "por el contrario, la capacidad de pago de Argentina es muy baja". Respecto de los temores de que los acreedores extranjeros intenten embargar bienes privados argentinos en el exterior para tratar al menos de recuperar algo, Bruno tranquilizó los ánimos al señalar que "los bienes de personas privadas no se pueden embargar salvo en caso de guerra".

Daniel Marx, gestor de buena parte del endeudamiento argentino en los 90, hizo un análisis técnico y advirtió que una vez formulada la propuesta a los acreedores, ésta debe ser única y el Gobierno no la debe cambiar, pues de lo contrario ningún acreedor se presentará pensando que la próxima oferta es mejor que la anterior. También pidió implementar incentivos financieros como un pago de contado para quienes acepten el canje porque de lo contrario puede suceder que muchos se nieguen a firmar pensando que si se quedan afuera cobrarán todo lo que se les adeuda vía judicial mientras que los que firmen cobrarán solo una parte.